Som Castelló asume el compromiso de posibilitar un cine de proximidad para mejorar la oferta de ocio en la capital de la Plana
Som Castelló se compromete a recuperar el antiguo cine Rex de Castelló. Comunicado:
"Som Castelló rescatará el Rex para posibilitar un cine de proximidad en el casco
urbano.
Som Castelló (Som CS), cuando llegue al Ayuntamiento, rescatará el
Teatro Cine Rex para recuperar la exhibición de películas en el centro de Castellón. El
partido municipalista considera que para mejorar la oferta de ocio en la capital de la Plana
es “necesario que el séptimo arte regrese al casco urbano, actualmente en salas de los
centros comerciales que circundan la ciudad”, como afirma el candidato de Som Castelló a
la alcaldía de Castellón, Javier Más.
Para Más, “ya no solamente hay que acercar el cine a los castellonenses, muchos de los cuales no se pueden desplazar hasta los parques comerciales del exterior del casco urbano, sino también poner en valor de nuevo un edificio singular que forma parte de la memoria colectiva de los ciudadanos”.
El 'nuevo' Rex será “gestionado por el Ayuntamiento, tendrá un carácter polivalente, y se dedicará también al teatro y a la música”, anuncia el candidato a la alcaldía de Castellón de los municipalistas.
Así mismo el cabeza de lista de Som Castelló recuerda que el Teatro Cine Rex fue “durante
casi 50 años un bastión de la cultura en la ciudad, con proyecciones de películas tan
emblemáticas como 'Lo que el viento se llevó', 'E.T. El extraterrestre', 'Tesis', 'Titánic' y
otras cintas icónicas del séptimo arte”.
Pero, también, en su calidad de teatro, acogió a los más destacados artistas de las artes
escénicas como Moncho Borrajo, María José Cantudo, Bárbara Rey, Florinda Chico,
Fernando Esteso, Amparo Larrañaga, los hermanos Calatrava, Bigote Arrocet y Arturo
Fernández, quien fue además el último actor que pisó el escenario del Rex cuando cerró
sus puertas en el 2004.
El cine fue inaugurado el 2 de diciembre de 1946, y llegó a tener 1.100 localidades. Durante cinco lustros fue gestionado por la empresa de Alejandro Payá, que, en la década de los 90 del pasado siglo lo transformó en dos salas de cine de cine de 500 y 300 butacas, respectivamente.