Las exportaciones de almendras con cáscara de la Comunitat Valenciana del periodo entre 2018 a 2022 fueron de 1.430 toneladas por un valor de 7,78 millones de euros
LA UNIÓ Llauradora valora positivamente el acuerdo suscrito por España y China para la exportación de almendra al país asiático. De cumplirse las estimaciones del Gobierno de salida hacia el mercado chino de unas 50.000 toneladas en el horizonte del año 2025 y unas 90.000 toneladas extra en 2032, sería un volumen apreciable que debería repercutir en beneficio de los productores de España y de la Comunitat Valenciana.
No consta según las cifras de DATACOMEX durante el periodo entre 2018 y 2022, ninguna exportación ni importación de almendras desde la Comunitat Valenciana a China o viceversa. Las exportaciones de almendras con cáscara de la Comunitat Valenciana del periodo entre 2018 a 2022 fueron de 1.430 toneladas por un valor de 7,78 millones de euros. Las importaciones de almendras en ese mismo periodo a la Comunitat Valenciana fueron de 2.578 toneladas por un valor de 5,83 millones. El balance comercial (exportaciones-importaciones) fue negativo en volumen en –1.146 toneladas, es decir importamos 1.145.970 kg más de los que exportamos, No obstante, en valor (euros), el balance es positivo en 1,95 millones. En cuanto al valor unitario, exportamos de media a 5,44 euros/kg almendra con corteza, mientras que las importaciones las hicimos a una media de 2,26 euros/kg, con un balance a nuestro favor de más 3,17 euros/kg.
Los acuerdos fitosanitarios que fundamentan esta salida comercial hacia uno de los mercados más importantes del mundo culminan un proceso iniciado en octubre de 2017, cuando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación solicitó formalmente a las autoridades chinas el inicio de las conversaciones para el establecimiento de los requisitos fitosanitarios que requieren una trazabilidad reforzada que exige el registro de las parcelas de cultivo y almacenes de confección que quieran participar en el programa de exportación, así como el seguimiento de determinadas medidas de manejo del cultivo durante el ciclo de producción hasta su salida hacia China.
No obstante, la apertura de nuevos mercados en un producto con previsiones de crecimiento en su consumo del 5 % anual no debe ser excusa para la reexportación de almendra procedente de países terceros, teniendo en cuenta que el balance exportaciones/importaciones de almendra en la Comunitat Valenciana refleja un precio bastante más barato en las importaciones.
Ricardo Beltrán, responsable del sector de frutos secos de LA UNIÓ, señala en este sentido que "ese es el principal peligro del acuerdo, puesto que sin obtener compromisos hacia la almendra de la Comunitat Valenciana se pueda hacer negocio, ya que por cada kg de almendra que se mueva en los mercados con las actuales cifras podrías ganar una media de 3,17 euros/kg".
El acuerdo por tanto no debe convertirse en moneda de cambio para la entrada en nuestro país de otras producciones que compitan deslealmente con la producción propia, de ahí que, desde LA UNIÓ, se insista en conocer el contenido del acuerdo y los requerimientos que conllevará este flujo de producto con destino a China en un sector aquejado por una difícil situación a lo largo de las últimas campañas.
Desde LA UNIÓ se señala que "las previsiones del alza del consumo de almendra en todo el mundo no han sido capaces, a corto y medio plazo, de incrementar los precios al productor y consiguientemente la rentabilidad, viabilidad y sostenibilidad del cultivo, en especial del cultivo tradicional en zonas frágiles en lo económico, lo social y lo ambiental como son las de la Comunitat Valenciana donde cumple este cultivo un papel fundamental".