Se trata de subvenciones por 12.623.208 euros en apoyo de inversiones para modernización y mejora de la competitividad de 512 explotaciones agrarias de la Comunitat
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LA UNIÓ de Llauradors insta a la Conselleria de Agricultura a que abone las ayudas pendientes a los planes de mejora de las explotaciones agrarias que están aprobadas y pendientes de pago desde hace ya dos años y cree que se debería hacer un esfuerzo importante en mejorar el sistema y la agilidad en todos estos procesos de ayudas.
Se trata de subvenciones por un total de 12.623.208 euros en apoyo de inversiones destinadas a la modernización y mejora de la competitividad de 512 explotaciones agrarias de la Comunitat Valenciana. Se trata de las explotaciones que solicitaron en 2017 estas ayudas y presentaron un plan de mejora que garantiza la sostenibilidad y viabilidad económica. Las ayudas son muy importantes para modernizar y profesionalizar el campo valenciano pues van dirigidas a agricultores profesionales o entidades asociativas cuya principal actividad sea la agraria y en la que al menos uno de los socios sea agricultor profesional por su dedicación en la entidad.
Se financian actuaciones como la adquisición o construcción de bienes inmuebles y compra de terrenos, la implantación y reestructuración de cultivos permanentes de distintas variedades de cítricos, modernización de instalaciones de riego que acrediten un ahorro efectivo del consumo de agua, la compra de maquinaria agraria y también de vehículos de carga y transporte. De igual manera se auxilian inversiones en equipos de acondicionamiento, comercialización y transformación de productos, instalaciones que reduzcan el impacto medioambiental de la actividad de la explotación o incrementen su eficiencia energética.
LA UNIÓ señala que un problema de gestión de la propia Conselleria de Agricultura no “pueden pagarlo los agricultores que obtuvieron una ayuda e hicieron una inversión y que ahora se ven ahogados por no tener un dinero que les corresponde”. La propia Conselleria informaba en mayo del pasado año que la duración máxima de estos planes de mejora es de tres años, por lo que “se estima que a lo largo de 2018 puede llegar a ejecutarse cerca del 60% de las inversiones previstas, por lo que pueden llegar a abonarse hasta 7,5 millones de euros”. Sin embargo, los pagos no se están produciendo.
LA UNIÓ indica que “nos consta que el Servicio de Estructuras Agrarias cumple y bien con su papel y que el embudo está en otro sitio puesto que las ayudas a la primera instalación sí se están cobrando”. Finalmente considera que “hay que subsanar un problema que se arrastra desde hace tiempo, pues está en juego evitar más abandonos en el sector y además de aquellas personas que quieren ser profesionales y quedarse definitivamente en la actividad agraria”.