Hay muchas posibilidades que, a partir del día 15, aparezcan tormentas gracias a una masa de aire que entrará desde el Atlántico
Esta o estas olas de calor parecen interminables. Los castellonenses, en este caso, las sufren tanto de día como, especialmente, por la noche. Cuesta conciliar el sueño con temperaturas que superan los 24 grados. Pero, según las previsiones, este calor tan intenso podría tener fecha de caducidad. Así lo indican las previsiones, que son eso, previsiones y poco más.
Al parecer, en la segunda quincena de agosto llegarán ese cambio, esa tendencia esperada por muchos, menos para los turistas que llenan las playas castellonenses buscando eso: sol, calor, … Este episodio de calor muy intenso podría llegar a su fin, con el mencionado repunte de las temperaturas.
A partir del próximo lunes llegará esa bajada de las temperaturas en la Comunitat Valenciana, que es lo que preocupa a los castellonense, valencianos y alicantinos. No será un descenso drástico, pero si en la zona costera se notara y será más fácil, por la noche, conciliar el sueño. Se dormirá mejor. Se notará más en esos pueblos donde las elevadas temperaturas de la noche, junto a la humedad, han estado elevando el bochorno nocturno.
Lo positivo serán los cambios que traerá una masa de aire del Atlántico, la negativa, y no menos positivo será que los miles y miles de turistas/veraneantes que disfrutan de las playas de la provincia de Castellón podrán tomarse con las tormentas, que llegarán empujadas por esos cambios que llegarán a nuestro país por el Atlántico.
Hace falta la lluvia
Es más que posible que esas tormentas que tanto se esperan, por aquello de que hace falta que llueva, barran buena parte del territorio español, llegando también a la provincia de Castellón. Y es que esas previsiones meteorológicas no cuestionan que habrá, con probabilidades muy altas, esas tormentas propias del verano: de corta duración y que vendrán acompañadas de aparato eléctrico.
Una lluvia que se espera desde hace semanas y meses por los agricultores que necesitan reforzar las aportaciones hídricas en el tramo final de las cosechas: almendra, algarroba y en alguna variedad de cítricos.
Temperaturas de récord
Hay que recordar que el mes de julio dejó cifras espectaculares de temperatura, como los 42,4 grados del aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, o una mínima nocturna de 27 grados en Valencia, a los que se llegó el 28 de julio. Estas cálidas temperaturas también se han sentido en la temperatura del mar.
El Mediterráneo está registrando un calentamiento insólito. De hecho, la boya con la que Puertos del Estado mide la temperatura del agua en Valencia, llegó el 2 de agosto a los 28,9 grados.