Sí, el conjunto albinegro está clasificado para disputar la fase final de la Copa RFEF, pero arrastra tres derrotas consecutivas, dos en Liga muy dolorosas y la del miércoles en Elche en el torneo del KO. Un equipo que había arrancado de manera espectacular ha visto frenada su racha con dos tropiezos liguero preocupantes por la pobre imagen exhibida tanto contra el Acero como contra el Requena.
F. F.
El Castellón está atravesando la fase más negativa desde que arrancó la temporada. Tres derrotas consecutivas, dos en Liga y una en Copa RFEF, avisan a los hombres de Joan Esteva de que por muy buen equipo que tengan esto no va a ser un camino de rosas, ni muchísimo menos. Toca ponerse el mono de faena porque en Tercera División a parte de calidad hace falta tener garra.
Se empezó perdieron contra un herido Acero en Castalia (0-1), para prolongar la desgracia en la visita al campo del Requena donde la escuadra de la capital de la Plana no estuvo nada acertada, en ningún sentido. Y el miércoles en la Copa RFEF se perdió por 4-2 contra los suplentes y cuatro juveniles del Elche Ilicitano. Se estuvo a un paso de echar por la borda el 3-1 de la ida.
No anda fino el conjunto albinegro. Y tiene la oportunidad de romper la dinámica este sábado, a las 21.00 horas, en el estadio Castalia contra un buen Cullera. Un rival que la temporada pasada se quedó fuera del 'play off' de ascenso en la última jornada de Liga. Y esta campaña mantiene una buena base del equipo y apunta a repetir temporadón.
Para la cita de este sábado, donde se aventuran cambios en el once inicial, la única baja es la ya sabida del joven central vallero Borja Quirant, que sufre una grave lesión en su rodilla derecha que pe obliga a decir adiós al presente curso liguero. Tras ser operado le esperan siete largos meses de rehabilitación.