Se trata del enésimo escándalo político que sucede en la pequeña localidad en los últimos tres años
Poco más de 3.000 habitantes tiene La Vilavella. Pero múltiples escándalos políticos le acompañan. El último, una moción de censura a la actual alcaldesa, Carmen Navarro, para que el PP no ocupa el sillón consistorial como estaba acordado.
Pero el esperpento va más allá. Abelardo Zaragoza, exalcaldable del PP y tránsfuga del partido apoya ahora la moción del PSPV y se especualaba con que pudiera convertirse en alcalde si finalmente la moción de censura da sus frutos.
Zaragoza fue elegido como alcalde de la localidad en las municipales de 2019, pero no acudió al pleno de constitución de la nueva corporación municipal.
Navarro, de Independents per La Villavella y que gobierna la localidad junto a los ediles del PP y otro independiente, ya ha tomado cartas en el asunto y ha pedido a los líderes del PP y PSPV provincial, Marta Barrachina y Samuel Falomir, que calmen las aguas.
"Como alcaldesa pido a al PP que apoye a sus concejales y al PSPV que hable con los suyos y que les digan que lo que van a hacer no está bien y que no se ha elegido de forma democrática", ha insistido Carmen Navarro.
La historia
Tras no acudir a la toma de posesión en 2019, Zaragoza facilitó que el PSPV gobernara la localidad y la dejo en manos de Manel Martínez, que posteriormente dimitió de su cargo tras desenmascarse unas conversaciones con la líder del PP en ese momento, Inma Traver, que no fueron nada bien acogidas en el seno del partido socialista.
El PSPV asegura que será Roglà el designado
En las próximas horas se rectificará ante la Secretaría del Ayuntamiento el documento registrado ayer miércoles y que presentaba un error en el nombre de la persona designada como candidato alternativo a la actual alcaldesa de IxLV. El PSPV-PSOE confirma que será el actual edil Sebastià Roglà quien asuma este papel. Con la formalización de este trámite se activará el procedimiento con la convocatoria automática del pleno.
La Ejecutiva Provincial del PSPV-PSOE da el visto bueno a la moción siempre que el concejal no adscrito, que recordamos nunca ha formado parte del grupo municipal popular, no obtenga privilegios, ni competenciales ni salariales, respecto a los que le corresponden como representante municipal.