Esta mañana la imagen peregrina de la Mare de Déu del Lledó ha visitado los internos del Centro Penitenciario de Castellón. Acompañada por el obispo, mons. Casimiro López Llorente, más de un centenar de reclusos han participado en un acto de veneración y oración. También estaban el prior de la Basílica, Josep Miquel Francés, el capellán de la prisión, Domingo Lorenzo, y representantes de la cofradía, camareres y pastoral penitenciaria.
Este ha sido uno de los actos más entrañables de la visita de la Virgen a la ciudad de Castellón con motivo del II Año Mariano de la patrona de la ciudad. Sonia Barreda, delegada diocesana de pastoral penitenciaria, explica que la figura materna, manifestada en la Madre de Dios, es muy importante para los reclusos: “Estoy segura que la visita les impactarán porque, en la cárcel, la última que cae y abandona el barco es la madre. Siempre permanece y nunca falla”.
Durante los días previos, los internos han preparado ofrendas, como poesías, cuadros o manualidades que ofrecerán a la Virgen. También se hará un retablo floral con las intenciones que cada uno quiera presentar a la patrona de Castellón. El prior de la Basílica, Josep Miquel Francés, que durante muchos años ha celebrado la eucaristía dominical en el centro, ha expuesto la historia y devoción del Lledó, y el Obispo ha dirigido unas palabras de ánimo y esperanza.