Noticias Castellón
jueves, 21 de noviembre de 2024 | Última actualización: 19:33

Los héroes de la Guardia Civil recibirán el mayor homenaje en la plaza Mayor

Tiempo de Lectura: 10 minutos, 38 segundos

Noticias Relacionadas

Por primera vez en su historia en Castellón, la Guardia Civil celebrará su fiesta grande fuera del cuartel y en contacto directo con todos los vecinos

La Guardia Civil celebrará su 180 aniversario en el día de El Pilar, el 12 de octubre en la plaza Mayor de Castellón. Será la primera vez que lo hagan fuera de su cuartel, en la provincia. Castellón debe mucho a los héroes de la Guardia Civil, y no cabe olvidar, que tras su fundación, la primera acción humanitaria que se cobró la vida de dos guardias, fue el siniestro de la diligencia en el barranco de Bellver. Desde entonces han pasado muchos años, pero la Guardia Civil sigue al servicio de toda la provincia.

Esta mañana comenzaban los preparativos para organizar la fiesta grande de la guardia Civil de Castellón, el día del Pilar, el 12 de octubre, en la Plaza Mayor de Castellón.

El hecho es importante, porque por primera vez en su historia en Castellón, los agentes del cuerpo celebrarán esta festividad fuera del cuartel, y lo harán en contacto con todos los vecinos de la ciudad. ¡Y no es para menos!, porque la Guardia Civil celebra el 180 aniversario de su fundación, y el 25 aniversario de la presencia de la Guardia Civil del Mar. En la historia de la provincia, la Guardia Civil ha realizado gestas heroicas que merecen el máximo respeto.

Historia de la fundación de la Guardia Civil

La Guardia Civil se creó en 1844 como un cuerpo especializado para luchar contra la inseguridad pública y para perseguir a los bandoleros que acosaban a los ciudadanos en los caminos.

España había atravesado una época difícil con la Guerra de la Independencia contra la invasión de los franceses, que fue enfrentada por las guerrillas, que nacieron desde la oposición popular. Pero concluida aquella guerra, fueron muchos los grupos los que quedaron descolgados y se constituyeron como bandoleros.

Las Cortes de Cádiz intentaron establecer un cuerpo de policía nacional y reunificaron la Milicia Nacional para ese objetivo. Pero la situación política en España no estaba para tirar cohetes. La llegada de Fernando VII, que rechazó toda apertura democrática y volvió a imponer el absolutismo, derivó en la abolición de aquellas Cortes y la Milicia. Aunque volvió a reconstituirse en 1820, volvió a ser abolida con el final del trienio liberal en 1823.

Tal como recoge la propia Guardia Civil en su página web: “En 1820, con el alzamiento de Riego, el teniente general Pedro Agustín Girón y de las Casas, primer duque de Ahumada, militar profesional de ideas liberales, es nombrado Ministro de la Guerra. Desde este puesto concibe un proyecto de Instituto armado para el mantenimiento del orden público: la Legión de Salvaguardias Nacionales que, inspirada en la Gendarmería Nacional francesa, debería combatir la delincuencia y garantizar la libre circulación de bienes y personas. Este proyecto no fue aprobado por las Cortes Generales por diversos avatares políticos, pero sin duda inspiró a su hijo, el segundo duque de Ahumada, en su idea de la futura Guardia Civil.

El 28 de marzo de 1844, se creaba oficialmente la Guardia Civil, por Real Decreto para constituir un “cuerpo especial de fuerza armada de Infantería y Caballería”, bajo la dependencia del Ministerio de la Gobernación y con “la denominación de Guardias Civiles”. A los efectos de organizar esta nueva fuerza se comisionó al mariscal de campo, Francisco Javier Girón y Ezpeleta, II Duque de Ahumada.

El informe del Duque de Ahumada el 20 de abril de 1844 establece la base organizativa de un cuerpo que debería tener la formación y remuneración suficiente para poder realizar el trabajo que se pretendía de él. El informe provocó la derogación inmediata del decreto anterior, que ni siquiera entró en vigor, para dar lugar al definitivo Real Decreto de 13 de mayo, presentado por el presidente de Gobierno y Ministro de la Guerra, Ramón María Narváez, auténtico decreto fundacional de la Guardia Civil.

El nuevo organismo dependía “del Ministerio de la Guerra en lo concerniente a su organización, personal, disciplina, material y percibo de sus haberes, y del Ministerio de la Gobernación en lo relativo a su servicio peculiar y su movimiento.”

E indica también la misma documentación: “Inicialmente se compondrá de 14 jefes, 232 oficiales y 5.769 guardias repartidos en 14 Tercios, recuperando de este modo un término de gran tradición y prestigio en la historia militar española pues hace referencia a unidades selectas del Ejército en la época de los Austrias. En cada uno de estos Tercios se encuadraría un número variable de Compañías de Infantería y un Escuadrón (o Sección independiente) de Caballería”.

En el verano de 1844 se inició el reclutamiento de los primeros aspirantes, muy superiores en número a las plazas ofertadas”. Eso significó, que la selección de los nuevos Guardias fue muy rigurosa “con una instrucción minuciosa y exigente de los nuevos guardias en las instalaciones del Ejército de Madrid, en Leganés y Vicálvaro.

“El 1 de septiembre de 1844, día de la designación del Duque de Ahumada como Inspector General de la Guardia Civil, tuvo lugar la presentación oficial del Cuerpo con una parada militar ante las autoridades dónde mil ochocientos setenta guardias desfilaron organizados en sus compañías y escuadrones haciendo gala de marcialidad y mostrando una nueva uniformidad en la que era nota distintiva un original sombrero de tres picos de origen francés: el tricornio, que con el tiempo se convertiría en uno de los símbolos representativos de la Guardia Civil y de nuestro país”.

“El 9 de octubre de 1844 se aprobaba el Reglamento para el Servicio de la Guardia Civil, estableciendo las obligaciones y facultades de la Guardia Civil, su dependencia orgánica, vinculada en lo referido a su servicio peculiar al Ministerio de la Gobernación, y el objeto primordial de la Institución: “la conservación del orden público, la protección de las personas y las propiedades (...) y el auxilio que reclame la ejecución de las leyes”.

El Reglamento Militar de la Guardia Civil fue aprobado el 15 de octubre, fue elaborado por el Ministerio de la Guerra bajo la dirección del Duque de Ahumada. En él se determinaba la organización con arreglo a criterios castrenses, los ascensos, dependencia, obligaciones, disciplina y estatuto del personal del Cuerpo.

Pero, “para culminar el proceso faltaba una filosofía de servicio que sirviera de puente y aunara ambos reglamentos y que distinguiera a la Guardia Civil de los cuerpos policiales anteriores o paralelos. Surge así el 20 de diciembre de 1845, de la propia mano del Duque de Ahumada, un documento que constituye el auténtico código moral de la Institución: la “Cartilla del Guardia Civil” que sintetiza los reglamentos anteriores y que, con alguna modificación, compone el actual Reglamento para el Servicio de la Guardia Civil.

A lo largo de su articulado, la “Cartilla” establece la doctrina del Cuerpo; un código deontológico que pretende dotar al personal de un alto concepto moral, del sentido de la honradez y de la seriedad en el servicio y que está presidido por su artículo más famoso donde se lee: “el honor es la principal divisa del guardia civil; debe, por consiguiente, conservarlo sin mancha. Una vez perdido, no se recobra jamás”.

Hoy en día la Guardia Civil está considerado como uno de los cuerpos de seguridad más selectos y especializado, pero también más respetado por la población española.

Los héroes del siniestro del Barranco de Torre Bellver en 1850

A lo largo de la historia, la Guardia Civil también ha ten ido una intervención reconocida por toda la provincia.

Los héroes de la Guardia Civil en Oropesa del Mar, en 1850

Por citar un hecho histórico que merece ser recordado, cabe señalar el relato del quien fuera alcalde de Benicàssim, José María Tárrega:

Relato del alcalde José María Tárrega, alcalde de Benicàssim sobre la heroicidad de los Guardias civiles en 1850

"Quiero recoger, en honor a la Guardia Civil, un hecho histórico ocurrido en el 1850 y es digno de recordar, difundir, admirar y agradecer. Muy cerquita de meso término municipal, en el pequeño barranco de la torre Bellver, donde todavía se conserva un monolito con inscripciones conmemorativas al hecho y tragedia ocurrida en dicho escenario. La noche del 14 al 15 de septiembre de 1850 dos guardias civiles dieron su vida por salvar a los viajeros de la diligencia. Era el coche correo que se dirigía a Valencia procedente de Barcelona, con trece pasajeros a bordo y les sorprendió una furiosa tempestad con abundante aguacero. Y al disponerse a cruzar el barranco al coche se atasco y la impetuosa corriente cómplice del huracan, volcó la diligencia. Los gritos de las pasajeros pidiendo auxilio, alertó al puesto de la Guardia Civil, que en aquellas fechas cumplían los tres años de creación-fundación."

"El comandante del puesto de Oropesa, el cabo don Benito Cepeda, por las inclemencias del tiempo, y su fuerza, con la debida vigilancia, se personaron en el lugar de la catástrofe, que era el barranco chinchilla de Oropesa, con la guarnición, don Antonio Abad y don Wenceslao Parez, solicitando la colaboración del pueblo de Oropesa, a través del alcalde, con un grupo de hombres y caballería al puesto del siniestro. Disponiendo que los guardas don Pedro Ortega y don Antonio Gimeno, saliesen en dirección opuesta, hasta encontrarse con la otra diligencia que desde Valencia se acercaba al lugar de la tragedia, intentando evitar otro suceso tan desagradable como al ya sucedido".

"El barranco de Bellver presentaba las mismas dificultades y el peligroso siniestro si no se tomaban las medidas preventivas. La tempestad, unidos los truenos y los relámpagos, acompañados de lluvia torrencial, huracanado viento y la oscuridad de la noche; la situación se hizo insalvable e insostenible, cobrándose las vidas humanas, sin que los héroes, los guardias Ortega y Gimeno, a pesa de su esfuerzo pudieran impedir la tragedia, pereciendo en compañía de los pasajeros. Este relato la cuento en honor de la Guardia Civil, en reconocimiento a los inmensos servicios prestados a la sociedad, desde su fundación hasta la actualidad. El historiador castellonense don Bemardo Mundana lo cuenta en una de sus publicaciones".

El heroísmo de los Guardias Civiles fue inmortalizado con un monolito que se erigió en su recuerdo en el Barranco de Bellver por orden de Francisco Javier Girón, Duque de Ahumada, y cuya leyenda reza:

“A la memoria de los Guardias Civiles Pedro Ortega y Antonio Giménez, que, en la noche del 14 de Setiembre de 1850, perecieron por salvar los pasageros que se hundieron con la Diligencia arrastrada por las aguas de este torrente”.

Años después, en su base fue colocada otra placa en la que puede leerse:

“150 ANIVERSARIO. OROPESA DEL MAR. En agradecimiento a la BENEMÉRITA por la labor humanitaria desarrollada durante 150 años y especialmente a Pedro Ortega y Antonio Gimeno, Guardias Civiles fallecidos por salvar a sus Conciudadanos en este Barranco de Bellver”.

Marcos Troitiño y René Gabril Álvarez, héroes en 2023

Desde entonces han sido muchas las heroicidades de los agentes de la Guardia Civil en la provincia. Cabe recordar las dos últimas registradas por Castellón Información que se produjeron en 2024. Una de ellas, la protagonizada por el Guardia Civil, Marcos Troitiño, que resultó herido de gravedad, cuando perseguía al presunto autor de un atraco en un centro comercial de Castellón, aunque estaba fuera de servicio. O el reconocido al Guardia Civil René Gabriel Álvarez cuando se tiró al mar para salvar la vida de tres niños en peligro der ahogamiento.

180 aniversario en plaza Mayor

En esta ocasión y en la celebración de su 180 aniversario la Guardia Civil celebrará sus actos más significativos en el corazón de Castellón. Y para que todo esté a punto y no falle nada, esta mañana los agentes del cuerpo, bajo el mando de David Sotoca, ya medían los espacios, diseñaban cómo se desarrollará el acto, y respondían a las preguntas que la población, curiosa, les formulaba.

A todos ellos Castellón Información les rinde el homenaje debido