La provincia castellonense, destino predilecto para el mercado doméstico que representa estos días más del 89% del total, registra un 87,7%, con puntos turísticos destacables como Peñíscola, el cual rebasa la media provincial con un 88,6% de ocupación quincenal
A la espalda queda una de las fechas más importantes del calendario turístico conocido como el puente de agosto y los datos que ha dejado han sido muy satisfactorios para los establecimientos hoteleros de la región con cifras superiores al 90% en la provincia de Alicante y Castellón, y del 85% en la provincia de Valencia, siendo los destinos de sol y playa como Benidorm, Calpe, Gandía o Peñíscola los más demandados situándose en todos los casos por encima del 93%.
Estos registros dan impulso a una quincena en la que la provincia de Alicante acaricia el 90%, con la zona de la Costa Blanca en un 89,8% y destinos como Calpe (92,4%), Benidorm (89,9%) y Altea a la cabeza, este último anotando prácticamente el lleno técnico gracias también a la celebración del conocido Castell de l'Olla.
En la misma línea, la provincia de Valencia anota los mismos datos que Alicante con un 89,8% de ocupación en los primeros quince días del mes. Reflejándose en este caso de forma más evidente la inclinación por los destinos de sol y playa, siendo ejemplo de ello Gandía con una ocupación por encima del 95% (hoteles asociados a HOSBEC), frente a destinos de perfil urbano como València ciudad donde se alcanza un 86,3%.
Finalmente la provincia de Castellón, destino predilecto para el mercado doméstico que representa estos días más del 89% del total, registra un 87,7%, con puntos turísticos destacables como Peñíscola, el cual rebasa la media provincial con un 88,6% de ocupación quincenal.
La desestacionalización una carrera de fondo
Desde comienzos del mes de julio como esta primera mitad del mes de agosto, se ha detectado un leve descenso no superior a 2 puntos en las ocupaciones respecto al pasado año 2023. Sin embargo, no son datos alarmantes ya que una mirada a largo plazo refleja que los niveles de enero hasta la fecha mantienen, y en algunos casos elevan, la media del año anterior en este mismo periodo.
Esto refleja la tendencia cada vez más habitual de los turistas a planificar sus vacaciones fuera de los tradicionales meses de julio y agosto. Un nuevo hábito que sin duda favorece la desestacionalización de los destinos, la cual se trabaja con ahínco desde el sector turístico de la Comunidad Valenciana.
La inclinación por experiencias más tranquilas, la búsqueda de precios más asequibles, evitar el calor, disfrutar de los productos turísticos asociados a la naturaleza o el incremento de la figura de los nómadas digitales y el teletrabajo, han propiciado sin duda estos nuevos hábitos entre los turistas.
Trabajar en pro de la desestacionalización es una carrera de fondo que requiere una planificación estratégica y que reporta a largo plazo beneficios significativos. En el caso del sector turístico de la Comunidad Valenciana se trabaja arduamente con la diversificación de la oferta turística, la asistencia a ferias de producto específicas, y con la atracción de nuevos nichos turísticos como el MICE, deportivo o de bienestar.