"El resultado es que Bataller no tiene influencia ante Valencia ni ante Madrid". Declaró la portavoz socialista del Ayuntamiento de Castellón.
Amparo Marco, la portavoz del grupo municipal socialista de Castellón, ha anunciado su desacuerdo con las prospecciones en las Islas Columbretes y le exige al alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, que el Ayuntamiento haga fuerza ante el Gobierno y así “evitar un deterioro irreversible al parque natural de Castellón”. Con estas palabras denunciaba la socialista el peligro que puede acarrear la investigación de hidrocarburos en la provincia castellonense, y aprovechaba las prospecciones para cuestionar si Bataller tiene el apoyo incondicional de su partido o si por el contrario, “se siente solo y despreciado por su imputación”.
Este tema ya se trató en el pleno del Ayuntamiento de Castellón donde se acordó instar al Gobierno de España a paralizar inmediatamente los proyectos de exploración petrolífera. Pero la última palabra la tiene el Gobierno, donde aseguran que seguirán adelante siempre y cuando la empresa Cairn Energy cuente con la aprobación de Medio Ambiente y asegure la total protección al paraje natural castellonense. A pesar de que Bataller no cuenta con las competencias necesarias para frenar las prospecciones desde su cargo, Marco le pide que actúe y explica que de lo contrario se demuestra el “ninguneo” con el que es tratado el alcalde. Además insiste en que Bataller no está preparado para defender la protesta contra el Gobierno central y que “está sometiéndose a las decisiones que se imponen desde Moncloa, que atentan contra los intereses de Castellón”. Ante estas acusaciones por parte de la portavoz socialista, el equipo de gobierno del Ayuntamiento ha recordado en varias ocasiones que esta medida se aprobó cuando gobernada el PSOE y reitera que actuará sólo si cuenta con la aprobación de medioambiente y cumpliendo todos los requisitos técnicos y legales.
Amparo Marco aludió también a la mala situación en la que se encuentra el alcalde por la presunta implicación en el caso Gürtel para reincidir en que “Castellón necesita un líder para defenderse de la incomprensión de Madrid y ahora no lo tiene”.