La portavoz socialista dice que “es un despropósito que mientras hay gente que ha perdido su casa por culpa de la crisis haya miles de pisos vacíos".
Castellón Información
La portavoz socialista de Castellón, Amparo Marco, propone que el Ayuntamiento solicite a la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria, más conocida como Sareb, la cesión de viviendas vacías para destinarlas a alquileres sociales. “Los últimos informes de organizaciones sociales confirman el agravamiento de la situación económica en Castellón. La crisis está dejando a centenares de castellonenses sin vivienda y el Ayuntamiento debe actuar”, afirma.
Marco considera que el Ayuntamiento de Castellón tiene capacidad política para pedir a la Sareb que le ofrezca una información actualizada de sus propiedades en el municipio y, de esa manera, reclamar al Ministerio de Economía que territorialice la gestión de los activos del 'banco malo' para facilitar la cesión temporal de los pisos vacíos en Castellón.
“Es un despropósito que mientras hay gente que ha perdido su casa por culpa de la crisis, haya viviendas vacías y desocupadas que en estos momentos no sirven para nada y tienen poco futuro en el mercado inmobiliario. Creemos que el mejor uso que pueden tener es el del alquiler social en esta situación de emergencia económica”, añade.
Marco lanzó la propuesta en el último pleno, en el debate sobre la creación de una Red de Viviendas Solidarias en la Capital. El objetivo de la iniciativa está dirigido a dar cobertura a quienes, por culpa de la crisis, han perdido sus viviendas. En especial, las personas o familias en situación de riesgo o exclusión social, las unidades familiares con todos los miembros en situación de desempleo o que hayan agotado las prestaciones y las que tenga menores a su cargo. La iniciativa fue rechazada por el Partido Popular.
La crisis ha dejado miles de viviendas vacías o a medio construir en Castellón, que no serán ocupadas en los próximos años, al no existir un mercado inmobiliario como el que había hace unos años. “Es momento pues de buscar soluciones financieras y técnicas que permitan reorientar esas viviendas abandonadas al mercado social”, apunta.
