La presidenta del Partido Popular de la provincia de Castellón, Marta Barrachina, se ha reunido a primera hora de hoy jueves con los alcaldes y representantes del PP de Bejís, Torás, Teresa y Sacañet cuyos municipios han resultado afectados por el incendio forestal declarado en la tarde del pasado lunes 15 de agosto a fin de activar medidas “que den respuesta inmediata a todas las demandas que nos han presentado”.
En esta línea, la presidenta provincial del PPCS propone que la Diputación Provincial de Castellón active una línea de ayudas para explotaciones agrícolas y ganaderas afectadas por incendios y que sea la Diputación la que se encargue de la coordinación con el resto de administraciones a través de la creación de una ventanilla única. Oficina que deberá estar dotada con el personal suficiente para que este pueda desplazarse hasta los ayuntamientos que así lo soliciten. El reto es atender todas las singularidades que planteen vecinos y administración local, y garantizar que los afectados puedan realizar todos los trámites necesarios para el acceso a las ayudas autonómicas y estatales.
La líder provincial del PP de Castellón ha atendido en Viver las consideraciones de los alcaldes y representantes del PP en las localidades afectadas en un incendio que ya ha arrasado más de 10.000 hectáreas. El objetivo es “escuchar de primera mano cuáles son las necesidades más acuciantes para los municipios afectados por el fuego”.
Tal y como ha manifestado la líder del PPCS, “vamos a pedir una reunión con el presidente de la Diputación porque la institución, como ayuntamiento de ayuntamientos, debe adoptar medidas urgentes”, resalta Barrachina. Dos son los principales ejes de actuación. En primer lugar, “aprobar una línea de ayudas para explotaciones agrícolas y ganaderas afectadas por los incendios para cubrir aquellos daños que no indemnicen los seguros”, explica la presidenta provincial del PP de Castellón y diputada, Marta Barrachina.
En segundo lugar, pero no menos importante, Barrachina propone que la Diputación se encargue de coordinar con todos los ayuntamientos que no pueden hacerlo el acceso a las ayudas que ofrecen el resto de administraciones, es decir Generalitat Valenciana y Gobierno de España. Para ello, y con el objetivo de evitar desplazamientos de los vecinos afectados, “la Diputación debe habilitar una ventanilla única que atienda, asesore y garantice la tramitación de las ayudas porque es la institución más cercana a los ayuntamientos e, indirectamente, a los vecinos, por lo que ha de cooperar y coordinar el trabajo”, subraya Barrachina. “Hay medios humanos y técnicos suficientes para gestionar todos los trámites si los ayuntamientos no pueden hacerlo y para que estos se desplacen allá donde lo soliciten los alcaldes”, añade la líder provincial del PPCS.
“En estos momentos nuestra máxima preocupación es la afección del incendio de Bejís, pero no olvidamos el incendio forestal de Les Useres o los recientes de Caudiel o Fuentes de Ayódar. La Diputación debe ayudar a los agricultores y ganaderos afectados en todos ellos porque de su trabajo depende en gran medida que se puedan prevenir futuros incendios”, explica Barrachina.
“En un momento como éste hay que aunar esfuerzos y sumar todos los recursos de Diputación, Generalitat y Gobierno de España al servicio de los ayuntamientos que se ven afectados por un incendio forestal”, explica la presidenta provincial del PP de Castellón. “La Diputación de Castellón debe actuar como portavoz de los pueblos de la provincia para trasladar sus necesidades y velar por restablecer de forma inmediata los servicios básicos perjudicados por el fuego”, añade Barrachina.
Cabe recordar que el Partido Popular de la Diputación Provincial también ha propuesto activar una línea de ayudas para zonas afectadas por el fuego que no entren en la categoría de Gran Incendio Forestal (GIF). El PP aboga por la necesidad de atender a los afectados por los incendios de menos de 500 hectáreas en la provincia de Castellón, es decir a los propietarios de aquellas terrenos que tienen alguna actividad económica, como los agricultores y ganaderos, y que no reciben ninguna ayuda por parte de la administración estatal y autonómica cuando sus campos son devastados por un incendio.
