El PP había presentado la moción, los otros grupos parecen compartir el contenido y negocian ‘la forma’
La moción del PP para declarar las Tascas de Castelló como zona Gastronómica de especial reconocimiento puede llegar al pleno del ayuntamiento del jueves con el voto de todas las formaciones. De momento, todos coinciden en el objetivo pero siguen trabajando en ‘la forma’.
Esperanza Molina/ Castellón Información
Realmente no podía ser de otra forma. Si hay algo que no cuadra a los ciudadanos es que los diferentes grupos políticos tengan un discurso parecido y hagan las mismas promesas, pero luego voten cosas distintas cuando tienen que ‘retratarse’.
Y precisamente esto es lo que ha ocurrido también con el conflicto de las Tascas de la capital de la Plana.
Si todos ellos, (los políticos), coinciden por separado en la necesidad de protegerlas para evitar su desaparición, ¿Cómo no ponerse de acuerdo para que las intenciones también puedan convertirse en hechos?
Realmente, haber, haber, de momento no hay nada más que eso. Un acuerdo de intenciones que se negocia para que pueda presentarse como una moción conjunta en el despacho extraordinario del pleno de Castelló del jueves.
Les Corts dieron luz verde a la declaración gastronómica de las tascas
No es la primera vez que el Grupo Popular defiende la necesidad de declarar las Tascas de Castelló como un espacio gastronómico protegido. Y de hecho, gracias a una de estas propuestas, el conflicto de las Tascas llegó a las Corts Valencianes y recibió el apoyo de todos los grupos.
Pero, a día de hoy, lo único que se ha conseguido es ‘demostrar’ que el nivel acústico de la zona está por debajo del máximo permitido por la ley. Con esa documentación la Junta de Gobierno ha publicado una ordenanza que, de aprobarse, retirará la denominación de ‘Zona Acústicamente Saturada’ en el área de las Tascas, pero ojo, también en su entorno.
Esa retirada de la ZAS es un paso adelante, pero no permite mucha cosa más de lo que ya había; de hecho, las consumiciones en la calle tendrán las 10:00 de la noche como hora límite, de lunes a lunes.
El portavoz del equipo de Gobierno, José Luís López, declaraba a los medios de comunicación, que el recorte de media hora en el permiso de consumición (que con la ZAS era hasta las 22:30), era de obligado cumplimiento durante el periodo de transición de dos años, que viene impuesto por la normativa.
Desde el Grupo Municipal Popular se cuestionaba tanto esta medida, como el hecho de que no se hubiera trabajado más en esa declaración gastronómica: “Con el reciente anuncio del levantamiento de la zona acústicamente saturada (ZAS), gracias al compromiso de los hosteleros y de los usuarios, que ha permitido reducir los niveles acústicos que implicaban tantas limitaciones a su actividad, es momento de dar un paso más y declarar las calles Isaac Peral y Barracas, y en el entorno de la plaza Santa Clara ‘zona de tradición gastronómica’. Esto permitiría blindar su continuidad, sin menoscabo del derecho al descanso vecinal”.
Y a tenor de estas declaraciones, López alegaba, que en tanto no se levante la declaración ZAS, y no acometa esa transición no se podría iniciar la declaración gastronómica…
¿Se puede o no se puede?
Lo cierto es que el PP ha presentado en junta de portavoces la moción que ha registrado para llevarla al pleno del jueves, en la que solicitan la creación de una mesa de negociación con los hosteleros de las Tascas, el equipo de gobierno, los representantes del resto de grupos políticos y los vecinos de la zona, a fin de buscar una solución de consenso.
Colaboración público-privada
Además, añade Carrasco, “instamos a potenciar la colaboración público-privada con el fin de desarrollar iniciativas de ámbito gastronómico que permitan multiplicar el atractivo de estos locales y que potencien su reclamo turístico, igual que hacen otras ciudades con una oferta gastronómica similar, como en La Rioja, Sevilla, Granada, Zaragoza o San Sebastián. Nuestras Tascas, además de ser un enclave de ocio y gastronomía, lo son también de socialización, al tiempo que permiten mantener con vida el centro, que está sumido en una situación de degradación, abandono y desertización de residentes, por las dificultades de accesibilidad, el cierre de locales comerciales o la pérdida de cada vez más servicios”.
Y después de presentarla, el resto de los grupos políticos, del gobierno y de la oposición, todos ellos han manifestado su apoyo en el contenido. ¿Dónde se rompen los asentimientos?, en las formas, es decir, en la redacción de la moción, en la explicación de motivos o en los matices de su proyección.
El acuerdo, en Junta de Portavoces ha sido precisamente ese, el de negociar entre todos como darle una forma conjunta que diga lo mismo pero que no ponga a nadie en el candelero de las críticas. Y parece que voluntad de conseguirlo, la hay.
De ser así, la moción del PP sería votada por toda la corporación municipal. Una moción en la que lo esencial, es declarar a las Tascas como ‘zona gastronómica’ con la intención de preservar una tradición de más de 40 años en la ciudad de Castellón, la actividad que generan sus locales y el empleo que crean, 70 puestos directos más los indirectos derivados de su actividad.
