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El presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, no ha querido perderse esta mañana el acto de inauguración de la ya tradicional Fira de l'Oli que se celebra en Canet lo Roig para mostrar el compromiso claro y decidido del Gobierno Provincial con el sector agroalimentario castellonense "por su innegable peso en el tejido económico, social y laboral del mundo rural de la provincia".
De este modo, durante su visita a una convocatoria que cuenta con hasta 30 expositores de un aceite "surgido de los olivos milenarios que nacen de una tierra única para formar parte de la mejor despensa del Mediterráneo", Moliner ha hecho hincapié en la importancia de "estar al lado en todo momento del sector primario y de los productores locales ya que su esfuerzo y saber hacer es uno de los mejores recursos que tiene nuestra provincia, y sobre todo su interior, para crecer y atraer riqueza".
Es por ello que el presidente provincial no ha dudado en calificar a "la agricultura, la gastronomía y el turismo como tres sectores fundamentasles de cara a uno de los principales retos de esta administración como es el de consolidar la población en el mundo rural castellonense. Tenemos los mejores productos y, por ello, el apasionante reto de trabajar de la mano para sumar oportunidades para nuestros pueblos y convertirlos en un lugar mejor para vivir, con más servicios, mejores infraestructuras y más y mejores oportunidades laborales".
Campaña Repoblem
En este sentido, el presidente de la institución provincial ha destacado cómo desde 2013 el Gobierno Provincial trabaja a través de la marca 'Castelló, Ruta de Sabor' para como sucede con el sector oleícola, "explotar al máximo todos los recursos que nos ofrece esta provincia de sabores tanto en clave gastronómica como turística y económica".
Para ello, a lo largo del año el Gobierno provincial va a destinar cerca de 900.000 euros al desarrollo rural a través de acciones destinadas a impulsar el sector primario castellonense, reforzar el trabajo de los productores locales y divulgar y poner en valor el patrimonio gastronómico provincial. De hecho, entre estas acciones se incluyen la presencia del producto culinario castellonense en ferias y espacios turísticos así como la financiación del VII Seminario de Olivicultura y Elaiotecnia o el servicio de catalogación de olivos monumentales.
"El objetivo es claro, que el sector primario se afiance como un pilar económico y laboral en las zonas rurales de la provincia y, de este modo, ayude a generar mayor calidad de vida y más oportunidades de futuro en nuestros municipios para que nadie tenga que abandonar su hogar por falta de servicios o empleo", ha subrayado el presidente provincial.