Wences Alós Valls. Alcalde de Moncofa.
Las personas son muchas veces impredecibles, capaces de lo mejor y también de lo peor. Lo vemos continuamente a nuestro alrededor y también a través de los medios de comunicación. Lo podemos comprobar estos todos con los estragos que está provocando la invasión de Ucrania, con miles de muertos, más de dos millones de personas desplazadas, destrucciones indiscriminadas...
El comportamiento deplorable de Vladimir Putin está teniendo el contrapunto en el comportamiento de otros pueblos, como el de Moncofa, donde la población se está volcando para ayudar. Como alcalde de Moncofa, es un motivo de orgullo comprobar la forma masiva en la que los vecinos de nuestro pueblo han entregado medicamentos, alimentos y ropa de abrigo, e informo que parte de cuyo material ya ha llegado a su destino.
Lo peor del espíritu humano es capaz de sacar también lo mejor cuando ves, incluso, a la gente no solo colaborando con la entrega de productos, sino también ayudando a empaquetar, y a empresas donando material o a lo que haga falta con el objetivo de ayudar a quienes peor lo están pasando.
Pero todo esto, además, te hace pensar que esta injusta invasión –al puro estilo nazi en la segunda guerra mundial- es un agravio que debería ser repudiado no solo por todos los grupos políticos en España sino en el mundo entero. Todos deberían condenar sin paliativos la invasión, pero no solo esto, también se debería estar conformes en frenar una agresión que está arrasando un país en el que hace menos de un mes se vivía en paz y con plena normalidad, claramente hay una potencia dictatorial que destruye hogares, hospitales, infraestructuras, mata personas y un pueblo que intenta defenderse como puede.
Por desgracia la situación va a continuar y los efectos no van a ser pasajeros por lo que el pueblo de Ucrania continuara necesitando la ayuda del pueblo de Moncofa y pido que los vecinos de Moncofa sigan dando ese ejemplo de solidaridad del que me siento enormemente orgullos.