El alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, ha vuelto a exigir a la Generalitat Valenciana que se desbloquee la situación de las pinturas rupestres de Morella la Vella y del albergue de Vallivana. Ambas, permanecen cerradas al público desde hace varios años y, pese a las buenas intenciones manifestadas por altos cargos de la Conselleria de Cultura, siguen sin reabrirse cuando concluye otro año.
El primer edil morellano señala que “Morella la Vella es el Patrimonio de la Humanidad de nuestra localidad, por tanto es un atractivo turístico, patrimonial y cultural muy importante, que de reabrirse crearía puestos de trabajo". Por ello, no entiende “cómo la situación sigue bloqueada desde hace cuatro años, más si cabe cuando una empresa se ha interesado en gestionarlo y a la Generalitat no le costaría ni un euro”.
Cabe recordar que el alcalde mantuvo una reunión con la Directora General de Cultura, Marta Alonso, y el Jefe de servicio de Cultura y Deporte de Castellón, Francisco Medina, a principios de septiembre y les exigió una solución para reabrirlo y que pueda generar actividad y puestos de trabajo, además de ser un atractivo turístico importante. Los responsables autonómicos adquirieron el compromiso de llevarlo a cabo, pero transcurridos tres meses, la situación continúa igual.
Por ello, desde el consistorio se responsabiliza a Medina y Alonso del cierre, del deterioro y de las pérdidas que conlleva. Al respecto, el primer edil morellano destacaba que "la prioridad para el ayuntamiento es clara y en estos momentos no se entiende cómo se pueden desaprovechar inversiones privadas para desbloquear un patrimonio y atractivo tan importante".
Por lo que respecta al Refugio Forestal de Vallivana, desde el Ayuntamiento de Morella también se ha exigido la cesión en numerosas ocasiones. Este inmueble es propiedad municipal, pero se gestiona desde la administración autonómica y permanece cerrado desde hace años, pese a estar rehabilitado. Este albergue también tiene una connotación afectiva muy importante para los vecinos de Morella, ya que está frente al santuario en el que se encuentra la Virgen de Vallivana, patrona de la localidad. Desde el consistorio se reclama la gestión, para aplicar un modelo similar al de Pereroles, ya que permitiría tener una oferta atractiva en este paraje, generar actividad y algún puesto de trabajo.
Buena gestión
El alcalde de Morella también subraya que “en estos casos no estamos pidiendo inversiones, sino una buena gestión para que desde el territorio podamos dinamizar estos espacois, que tienen tanta potencialidad y que la Generalitat tiene abandonados”. Por último, Rhamsés Ripollés concluye que “estas instalaciones deberían estar abiertas, de forma que se aumentarían las posibilidades turísticas de nuestros visitantes, podrían hacer uso nuestros vecinos y vecinas y generarían puestos de trabajo”.