Centenares de vecinos y vecinas han partido hoy hacia Vallivana, cumpliendo la tradición de la Rogativa. Además, anoche se presentó el libro 'Síntesis de las Guerras Carlistas'.
Castellón Información
Los vecinos y vecinas de Morella ya han iniciado su tradicional camino devocional, que les lleva hacia Vallivana. Centenares de 'rogativeros' han partido a las nueve de la mañana de la ciudad amurallada, para recorrer los más de veinte kilómetros que les separan del santuario en el que se encuentra la Mare de Déu. La llegada será sobre las seis de la tarde, mientras que mañana se realizará el recorrido a la inversa.
La bandera blanca marca el ritmo del viaje y es seguida por la cruz y por todos los 'rogativeros'. Mientras se avanza, los cánticos de veneración a la patrona se suceden. Las tres paradas que se realizan durante el recorrido, se producen en el Hostal Nou, la Torreta y el Pont de la Bota, antes de llegar sobre las 7 de la tarde a Vallivana. Los más de 20 kilómetros de distancia finalizan en el Santuario de Vallivana, para mañana iniciarse la subida. A primera hora de la mañana, los morellanos realizan el mismo recorrido y mismas paradas, pero en sentido contrario.
Como es habitual, la Rogativa sólo se celebra el primer sábado de mayo de cada año. Excepto en los años sexennales, en los que la fecha cambia y se realiza una en agosto para que la Mare de Déu presida las fiestas en su honor y otra en octubre para devolverla a “su casa”.
Manuel Salvador y las guerras carlistas
Anoche también tuvo lugar la presentación del libro 'Síntesis de las Guerras Carlistas', en la Lonja del Ayuntamiento de Morella. Manuel Salvador, autor de la obra, fue un militar nacido en Castellón que dedicó parte de su vida al estudio de Morella, publicando numerosos textos tanto en AMIC, como en la Socidad Castellonense de Cultura. Salvador falleció hace un año y fue una de las personas que mejor conocían el castillo de la localidad y las Guerras Carlistas. Hay que recordar que el alcalde de Morella concedió la Cruz de Santa Llúcia a título póstumo, a Salvador, por todo el estudio y trabajo por Morella y por la estima que tenía por esta ciudad. También hay que señalar que por voluntad del autor y de su familia, la recaudación de este libro se destinará a mejorar el castillo de Morella y, que en la actualidad, el Salón del Carlismo de la fortaleza, se puede visitar gracias a su trabajo y su sueño de exponer distintas piezas de estas guerras.