El centro escolar denunció ayer que se habían colgado carteles sin permiso para una manifestación en Castelló el sábado
M.G//Castellón Información
Sigue el entuerto entre los negacionistas y el CEIP Pascual Nàcher de Vila-real.
Si ayer este medio informaba de que los contrarios a las vacunas de la Covid colgaban carteles en la cristalera de la pared exterior del colegio para la convocatoria de una manifestación en la Plaza Maria Agustina de Castelló, hoy se han vuelto a vivir momentos de tensión en el centro ubicado frente al ambulatorio Cariñena.
Este jueves tenía que empezar la vacunación de los niños de entre 5 y 8 años. Pues un grupo de tres personas se han personado en el centro con el fin de parar esta vacunación.
Según han confirmado fuentes de la Policía Local a Castellón Información, el suceso no ha generado más revuelo ya que la pronta acción policial ha evitado que las cosas fueran a mayores.
Denuncias del Colegio de Médicos de Castellón ante la acción policial
El Colegio de Médicos de Castellón ha lamentado que un agente de la Policía Local haya pedido al personal sanitario que se identifique, cuando habían acudido al centro escolar en cumplimiento de las órdenes dadas por los responsables del Departamento de Salud de la Plana, quienes previamente habían notificado a la Dirección del CEIP su presencia para vacunar a aquellos menores que contasen con la preceptiva y necesaria autorización paterna. Algunos de los/as padres/madres estaban presentes acompañando a sus hijos.
"El COMCAS censura que la petición de identificación del personal sanitario obstaculizase la tarea encomendada. Por ello, además de reiterar nuestro apoyo a los profesionales que estaban ejerciendo y cumpliendo con su deber, urgimos -y así se lo haremos saber- a la administración autonómica, la Conselleria de Sanidad, directores de Atención Primaria y gerentes de las áreas de salud que refuercen el papel que ejercen estos profesionales e implementen las medidas de protección necesarias para que puedan realizar su trabajo en las mejores condiciones posibles. No es de recibo este tipo de situaciones que agudizan la presión sobre los profesionales de la Atención Primaria que llevan más de un año padeciendo una sobrecarga de trabajo que pone al borde del colapso la que es la puerta de entrada al sistema de salud pública", ha especificado el colegio profesional en un comunicado.