Las compañías están impulsando una red de puntos de recarga en lugares públicos para acelerar la transición energética inteligente
Castellón Información
EDistribución, la filial de redes de Endesa, ha puesto en marcha un plan de renovación de su flota de vehículos por modelos eléctricos, en línea con su Plan Estratégico de descarbonización de sus actividades. La Compañía ha adquirido 14 Nissan Leaf en Canarias, el vehículo 100% eléctrico más vendido en todo el mundo.
Estos Nissan Leaf se destinarán a apoyar las labores de campo en los desplazamientos de los técnicos. En las islas, en una primera fase, Endesa ha incorporado ya esta semana 14 coches eléctricos, lo que supone electrificar el 20% del total de la flota del área de distribución en Canarias.
Los vehículos eléctricos han sido entregados esta semana en las instalaciones de Arimotor en Tenerife, en presencia de su jefe de Ventas, Agustín Déniz, y Eugenio Cruz, responsable de Red en Tenerife de EDistribución.
Los nuevos coches eléctricos serán distribuidos ahora entre las islas de Gran Canaria, Lanzarote, La Gomera y El Hierro, además de Tenerife. En la segunda fase de este plan, en 2021, Endesa tiene previsto incorporar otros 23 vehículos eléctricos a la flota de EDistribución en las islas y, en la última fase, en 2023, un total de 38, con lo que todo el parque móvil será eléctrico.
Además de promover el uso del coche eléctrico en la empresa, Endesa al igual que Nissan están impulsando la ejecución de una red de puntos de recarga en lugares de acceso público además de soluciones para acelerar la transición energética y facilitar la vida de las personas, las ciudades y los negocios.
Sin duda, el vehículo eléctrico es el arma más potente para reducir las emisiones de efecto invernadero, las emisiones de CO2. En este sentido, Nissan, compañía líder de vehículos eléctricos en España, con los vehículos eléctricos matriculados en España el año pasado consiguió ahorrar más de 4.000 toneladas de CO2, el equivalente a un bosque de 134.000 árboles.
Por otro lado, en el contexto actual, y en especial durante la etapa del confinamiento, las emisiones de CO2 se redujeron un 30%. Pero es que además, la mejora en la calidad del aire derivada del menor uso de los medios de transporte a base de combustibles fósiles, según Ecologistas en Acción, redujo un 58% la polución en las grandes ciudades.
Está claro que esta pandemia está acelerando ciertos cambios ya iniciados antes de que surgiera este virus. Los ciudadanos han podido observar cómo es posible reducir de manera significativa la polución y el CO2 de las grandes ciudades. Sin embargo, al mismo tiempo de la reducción de la movilidad, la pandemia ha traído consigo una importante supresión de la actividad económica en los núcleos urbanos.
La pregunta es, es si es posible recuperar esa actividad económica y al mismo tiempo mantener los niveles de movilidad y aspirar a que las emisiones a la atmósfera fueran parecidas a las habidas durante el confinamiento. La respuesta viene del lado de la movilidad eléctrica, pues es la única fuente de propulsión actual que podría conseguir unas emisiones tan considerables que fueran capaces de reducir de manera significativa las emisiones de gases nocivos y de CO2 a la atmósfera.
Si fuésemos capaces de sustituir la mitad de la flota de vehículos de combustión por vehículos electrificados cero emisiones, alcanzaríamos una reducción de CO2 que nos permitiría mantener los niveles de bajas emisiones derivados del estado de confinamiento, es decir, alcanzar esa reducción del 30%, junto con una reducción de más de 60% de la contaminación, si bien, al mismo tiempo conseguiríamos impulsar la actividad económica y la movilidad.
En definitiva, el camino de la electrificación es la llave que nos puede proporcionar crecimiento económico y reducción de emisiones. Tanto Nissan como Endesa lideran este sendero hacia una movilidad inteligente y sostenible.
