La presidenta del Colegio Profesional de Bibliotecarios y Documentalistas de la Comunidad Valenciana, Alicia Sellés, tras reunirse con el alcalde de Nules, Mario García, para conocer personalmente los detalles del proyecto de voluntariado desarrollado en el Biblioteca Municipal el pasado mes de enero, ha reconocido que “no existe ninguna irregularidad”, dado que como expuso desde el primer día el alcalde “los voluntarios en ningún momento sustituyeron a los técnicos y se limitaron a posibilitar que las puertas del edificio permanecieran abiertas, realizando un control de entradas y salidas”.
La reunión se ha mantenido como consecuencia de la polémica surgida por el comunicado hecho público desde el propio Colegio, en el que, si bien se valoraba positivamente la decisión del consistorio de ampliar el horario de apertura de la biblioteca, se denunciaba la posible irregularidad de que fueran voluntarios y no profesionales los que realizaran este servicio.
Desde el día que se planteó el proyecto, propuesto por un grupo de estudiantes de Nules usuarios habituales de las instalaciones, desde la alcaldía se defendió que “sólo iban a hacer posible que la Biblioteca estuviera abierta más horas, lo que fue muy positivo porque muchas personas pudieron estudiar en ella en el horario extraordinario”.
García señala que “estamos convencidos de que no existió en ningún momento una mala intención del Colegio de Bibliotecarios, más bien al contrario, se preocuparon por el servicio que se estaba prestando en Nules, aunque es evidente que no se les había facilitado la información correcta”.
En la reunión, el alcalde ha mostrado a la presidenta del Colegio profesional el cuadrante de horarios de los técnicos que trabajan en estas instalaciones “para que pudiera comprobar personalmente cuál es la problemática que tenemos a nivel municipal en nuestra Biblioteca, lo que por otro lado sirve para desmentir a todos aquellos que han llegado a afirmar que tenemos algo en contra de los funcionarios. El problema es muy concreto y se puede demostrar, como lo hemos hecho”.
La presidenta del Colegio de Bibliotecarios, ha reconocido así en la reunión mantenida en el Ayuntamiento de Nules, que se ha realizado una apuesta importante por mejorar el servicio que se presta a los usuarios de la Biblioteca Municipal “y de hecho se ofrecieron a colaborar en futuros proyectos de estas características, lo que les agradecemos mucho”.
De hecho, Alicia Sellés ha ofrecido al ayuntamiento, entre otras cosas, la bolsa de trabajo del Colegio, que cuenta con personal cualificado “para desarrollar proyectos de intervención directa en las bibliotecas”, así como la firma convenios de colaboración, como por ejemplo para el desarrollo de proyectos profesionales o la realización de prácticas, o incluso ofrecer apoyo técnico para la posible convocatoria de la plaza de bibliotecario, con la que en la actualidad no cuenta este servicio público.
Sobre este tema, Alicia Sellés aconsejó que el ayuntamiento “debería hacer el esfuerzo por convocar la plaza de bibliotecario en cuanto sea posible, para posibilitar la inclusión de Nules en la Red de Bibliotecas Públicas Valencianas”. En este sentido, el alcalde aseguró que ese es el objetivo del equipo de gobierno, aunque es un proyecto que no se puede acometer en estos momentos, ya que el Estado no permite la convocatoria de nuevas plazas públicas en los ayuntamientos, pero “cuando legalmente se pueda, nuestra intención es convocar esta plaza, de manera que nuestra biblioteca pueda estar gestionada por un funcionario con la calificación profesional correspondiente”.
Zanjado este episodio, el alcalde de Nules únicamente ha lamentado que, aprovechándose de la preocupación el Colegio Profesional por cómo se podía estar desarrollando este proyecto de voluntariado, “algunos grupos políticos hayan intentado convertir un proyecto tan positivo, en una excusa para poner en duda la gestión del equipo de gobierno, lo que no tiene ningún sentido”. Por ello, García ha asegurado que “ahora sería justo que quienes han polemizado sobre este tema, reconozcan públicamente que se han equivocado, porque su posicionamiento político intencionado, ha supuesto un perjuicio para la imagen del ayuntamiento y de las personas que voluntariamente se ofrecieron a mejorar un servicio público”.
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