Entre los beneficiarios hay 21 lactantes y 68 niños de entre 2 y 8 años.
Castellón Información
Durante esta semana el Ayuntamiento de Nules, a través de la concejalía de Servicios Sociales, repartirá un total de 14.498 kilos de alimentos no perecederos entre 572 vecinos del municipio, dentro de la campaña anual del Banco de Alimentos, que se realiza a través de las aportaciones del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). Como explica la concejala del área, Isabel Miró, esta ayuda es complementaria a la que periódicamente realiza el Ayuntamiento, por el convenio que se suscribe con la Conselleria de Bienestar Social, con la entrega de bonos para la compra de alimentos entre las familias que acreditan su situación de necesidad.
De esta forma desde el consistorio se intenta dar la respuesta más efectiva posible a la situación de emergencia que viven muchas familias del municipio, aunque para ello también se cuenta con la colaboración activa tanto de Cruz Roja, como de Cáritas, con quien también se suscribe un convenio anual de colaboración, a fin de hacer posible su acción social “que consideramos fundamental”, señala Miró.
De hecho, para que la acción social sea realmente efectiva “y llegue al mayor número posible de personas con necesidades básicas”, este año se ha intentado ordenar la concesión de ayudas, de manera que “las personas que demanden ayuda de alimentos sólo puedan acudir a una de las entidades ofertantes”. De este modo, quien recibe comida de Cruz Roja, no podrá acudir a Cáritas o al Ayuntamiento “porque hemos detectado que en algunos casos hay personas que reciben ayuda de varios sitios, lo que provoca que los recursos con que contamos, que por desgracia son limitados, no lleguen a todos y nuestra obligación es garantizar que todo aquel que se encuentre en situación de emergencia pueda tener acceso a alimentos básicos fundamentales”.
Así, los demandantes tienen la libertad de decidir a que institución u organización acuden para recibir los alimentos, de ahí que el Ayuntamiento pueda cuantificar su aportación a las casi 600 personas inscritas en sus registros, lo que ha supuesto una disminución respecto a años anteriores “lo que no quiere decir que se ayude a menos gente, sino que los beneficiarios de las ayudas, al sólo poder optar a una de las tres opciones disponibles, se han decantado mayoritariamente por Cáritas”.
Entre las personas que recibirán la aportación del Banco de Alimentos municipal hay 21 lactantes y 68 niños de entre 2 y 8 años “que reciben alimentación específica, apropiada para su edad y sus requerimientos nutritivos”. Isabel Miró señala que “entendemos que es fundamental que todos los que nos dedicamos a ayudar a la gente que más lo necesita estemos bien coordinados y colaboremos, porque es la mejor manera de garantizar que el trabajo que realizamos en este sentido sea lo más efectivo posible”.