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La Comunidad de Vertidos Nules-La Vilavella (EDAR), que en esta legislatura está presidida por el alcalde de Nules, David García, cuya vicepresidenta es la alcaldesa de la Vilavella, Carmen Navarro, y como vocales los concejales Adrián Sorribes y Manel Navarro, ha mantenido recientemente una reunión de su junta directiva para analizar las últimas gestiones de la entidad.
En primer lugar se ha dado cuenta de que ya ha sido negociado el pago de la deuda heredada que se ha encontrado la entidad tanto con la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), que quedará saldada en abril de este año, como con FACSA, con quien se ha establecido un plan de pagos a varios años.
Por otro lado, y con el objetivo de abaratar costes, se sacará a licitación el servicio de Policía de Vertidos. Al efecto se ha remitido la solicitud correspondiente a los servicios de contratación de la Diputación para que asuma la tramitación.
Además, se ha aceptado por la CHJ los nuevos valores límite de emisión graduales propuestos en el programa de reducción de la contaminación por cloruros, permitiendo asegurar el cumplimiento de una manera más robusta frente al límite que antes se disponía.
Por último, se estima que para el canon de control de vertidos del año 2015 a liquidar por la CHJ a la Comunidad de Vertidos, el tratamiento se considerará adecuado y el importe que se liquidará será de 17.622,80 euros, lo que supondrá un ahorro de 70.491,20 euros respecto a años anteriores.
Para el presidente de la EDAR y alcalde de Nules, David García, “nos encontramos con una deuda siete veces superior al presupuesto que maneja anualmente la Comunidad de Usuarios de Vertidos Nules-La Vilavella y con responsabilidad y gestión se ha conseguido encaminar el rumbo para pagar lo que debíamos, tras la dejadez absoluta de los anteriores gestores del PP de Nules y la Vilavella”.
