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El Ayuntamiento de Nules, a través de la concejalía de Agricultura, dirigida por César Estañol, ha puesto en marcha una batería de medidas encaminadas a la reactivación del sector agrícola de la población, “aunando esfuerzos entre los distintos agentes implicados y profundizando en los problemas reales que afectan actualmente al agricultor”, en palabras del edil.
De este modo, la primera medida que se ha puesto en marcha ha sido la de reactivar el banco de tierras existente en la población. Para ello, se está catalogando el conjunto de fincas abandonadas, requiriéndoles a sus dueños que mantengan limpia la finca, con la finalidad de no perjudicar a las fincas colindantes, ni con posibles plagas o malas hierbas, ni, ahora que llega el calor, con posibles incendios.
En el caso de que no se proceda a la limpieza de la finca en el plazo estipulado, se procederá a la imposición de multas coercitivas, de modo que, en última instancia, el propio Ayuntamiento pueda proceder a la limpieza de la finca, en caso de que no se haya realizado. El coste de la limpieza se cargaría al propio propietario o, en última instancia, como carga a la finca en cuestión.
Novedades
La novedad que se introduce en este punto es que se le da al propietario la posibilidad de ceder la finca al listado existente en el banco de tierras de la población, que aunque no le exime de su limpieza, sí que le da la posibilidad de que la finca sea alquilada, con lo que podría ser atendida por un tercero. Así, no solamente no tendría ya ningún gasto, sino que podría obtener una rentabilidad de la misma.
Para ello, se ha preparado un procedimiento desde el consistorio para el funcionamiento de este banco de tierras, en el que en primer lugar se ofrecerán las fincas que se inscriban en el banco de tierras a los colindantes a las mismas, de modo que el primer beneficiado pueda ser el vecino que tiene una finca, pudiendo tener una de mayor tamaño en el mismo emplazamiento.
En segundo lugar, se ofrecerán las fincas a las distintas cooperativas agrarias de la población y, en última instancia, se dejarán libres para que cualquier persona o empresa pueda optar a ellas.
Además, tal y como destaca Estañol, “hemos confeccionado desde el Ayuntamiento un contrato tipo para las partes, de forma que se pueda garantizar seguridad jurídica a ambas, dotando de las herramientas temporales y resolutorias que permitan tanto al arrendador como al arrendatario la viabilidad de la operación”.
La duración de los contratos podrá ser diversa, en función de que se trate de fincas en producción o fincas que haya que transformar, y el coste de la transformación o limpieza inicial se podrá incorporar como parte del pago del alquiler en especie.
Aceptación entre los agricultores
Por el momento, esta medida ha tenido una gran aceptación entre los agricultores que, por el motivo que sea, no pueden mantener sus fincas en condiciones, ya que se les da una salida para que no les suponga un coste periódico de mantenimiento de la finca. Por otra parte, entre el resto de agricultores, además de pasar a tener las fincas colindantes en buen estado, tienen la posibilidad de aumentar su producción.
Para finalizar, el concejal de Agricultura destaca que en breve “se irán presentando el resto de medidas en las que se está trabajando, pero esta primera era necesaria y estaba siendo reclamada a voces por el conjunto de nuestros agricultores, debido a la proliferación en los últimos tiempos de fincas abandonadas en nuestro término municipal”.
