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Después de 4 meses sin noticias sobre la presencia de nutrias en el Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Millars, concretamente desde el pasado mes de mayo, se ha vuelto a localizar el rastro de un ejemplar. Ha ocurrido en el transcurso de una inspección rutinaria del servicio de vigilancia de la Guardería Rural del Consorcio río Millars. Aguas arriba del azud de Vila-real han aparecido dos localizaciones próximas con rastros distintivos de nutria.
El guarda del Consorcio, David López, explica el hallazgo: "Hemos determinado que se trata de nutria por los excrementos. Suelen tener suficientes restos de cangrejo rojo americano, alguna espina de pescado y a veces pequeños huesos de micro mamíferos. Las nutrias suelen utilizar los mismos puntos para defecar. Hacen algo que se llama letrinas, es decir, suelen marcar y defecar en el mismo punto de manera repetida. También dejan rastros de huellas y rasguños". Sobre todo hay dos características que han determinado que se trata de cacas de nutria y no de visones americanos. En primer lugar el tamaño, ya que las defecaciones de nutria son mayores que las de los visones. Después se define por el olor. Según explica David López, los excrementos de nutria huelen a pescado mientras que las de los visones hacen un olor muy fuerte a deposición.
Seguimiento mensual de las nutrias
Los primeros rastros de nutria aparecieron en la desembocadura del río Millars el pasado mes de octubre de 2015. Desde entonces la Guardería del Consorcio realiza un seguimiento activo de esta especie tan rara y escasa en los tramos bajos de los ríos valencianos. "Desde el momento que detectamos presencia de nutria, la guardería hace un seguimiento mensual de la especie junto con la Consejería de Medio Ambiente. Tenemos varios puntos de control que vamos visitando periódicamente, al menos una vez al mes", puntualiza David López.
Donde viven las nutrias desaparecen los visones americanos
Existe un dato curioso en cuanto al territorio fluvial de las nutrias. Allí donde se establece la nutria, animal fuertemente territorial, expulsa inmediatamente a los visones americanos, se trata de una especie invasora introducida de Estados Unidos hacia los años 60 del siglo pasado. De hecho la zona donde han vuelto a aparecer rastros de nutrias, aguas arriba del azud de Vila-real, estaba hasta ahora ocupada por visones americanos. "La zona donde ha aparecido la nutria también es territorio del visón. Hace 4 meses que no encontrábamos rastro de nutria y en cambio encontramos de visón americano pero ahora los indicios de la presencia de visón han desaparecido con el retorno de la nutria. Entonces está claro que la presencia de la nutria desplaza al visón", afirma el guarda del Consorcio. De hecho el pasado mes de julio un vecino de Vila-real fotografió hasta 5 ejemplares de visones americanos en una zona conocida como la "luz de Tol", donde se encuentra la central hidroeléctrica de Vila-real y emplazamiento próximo al lugar que ocupa actualmente la nutria.
