Vicente Blay Casino Serra. Portavoz adj. PP Almassora. Presidente NNGG provincial
Bajar los impuestos a todos los valencianos para generar empleo y riqueza y, sobre todo, para que aquellos que menos ingresan sean los que menos paguen. Así de simple pero así de rotundo. Esa es la máxima de la necesaria revolución fiscal anunciada por el presidente del PPCV, Carlos Mazón, y que será una realidad de la que nos beneficiaremos todos los que vivimos en 'la millor terreta del món'.
Y lo será cuanto antes por el bien de castellonenses, alicantinos y valencianos. Porque cuando hace más de seis años Puig entró por la puerta del Consell; las oportunidades laborales, la competitividad empresarial y el empleo salieron por la ventana de esta Comunitat y ya va siendo hora de recuperar el esplendor de una tierra hecha a sí misma y que tiene en su gente a su principal activo.
Por eso, en cuanto Mazón sea el presidente que los valencianos merecen y necesitan, esta región dejará de ser una de las que mayor presión fiscal ejerce sobre su gente para lograr, bajo el paraguas del Partido Popular, el menor IRPF de España para rentas bajas.
Para ello, el plan fiscal del PPCV aplicará una rebaja del tramo autonómico del IRPF del 10 al 9%, que es el tope legal, y el aumento del mínimo personal exento de tributación, que pasaría a ser de 6.150 euros. Dos cambios claros que, para ejemplificarlo, permitirán por ejemplo que un valenciano con un salario de 15.000 euros se ahorre casi un 32% respecto a lo que hoy paga por culpa del infierno fiscal del PSOE de Puig.
Y que nadie dude que con esta revolución fiscal saldremos ganando todos. Sin duda y sin excepciones. Porque el dinero donde mejor está es en el bolsillo de los valencianos y será así como el empleo, las oportunidades y la competitividad regresarán a la Comunitat dejando atrás las piedras en el camino que la izquierda valenciana le pone sistemáticamente.
Además, esto solo es el principio. Porque en el Partido Popular tenemos muy claro que apostar por una necesaria revisión a la baja, o incluso exención como ha hecho el PP en Madrid, de los impuestos (como sucederá con el injusto de Sucesiones, Donaciones y Patrimonio) es hacerlo por la generación de riqueza y el crecimiento.
Mazón ya ha dejado clara su hoja de ruta y ese es el único camino por el que transitará el PP. A nivel nacional, autonómico y provincial. El de la bajada masiva de impuestos para que los verdaderos protagonistas, la gente, sean los que sigan abonando un futuro de oportunidades para todos.
Mientras esa necesaria revolución fiscal llega, esperemos que el PSOE deje de asfixiar a los valencianos. El presente y el futuro de la Comunitat Valenciana se lo agradecerían