Fue el propietario de los burros quien solicitó autorización para ubicar los animales dentro de una parcela privada en el parque natural
Castellón Información
Desde la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica se ha informado al respecto que fue el propietario de los burros, un ganadero, quien solicitó autorización para ubicar los animales dentro de una parcela privada del parque natural para pastar. Hay que recordar que el departamento de la Generalitat Valenciana inició en septiembre un programa basado en la introducción de medio centenar de burros en el parque natural del Desierto de Las Palmas. La idea consistía en que los animales, a la vez que se alimentaban, sirvieran como cortafuegos incluso en lugares de difícil acceso para los agentes forestales.
La muerte de una decena de burros en el Desierto de Las Palmas, de Castellón, fue trasladado a la Fiscalía de la capital de la Plana por el Grupo Popular en las Cortes Valencianas. El PP solicitaba la comparecencia de la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, en las Cortes Valencianas para que explique lo sucedido.
Elisa Díaz, portavoz de Medio Ambiente del Grupo Popular en las Cortes Valencianas, ha registrado diferentes preguntas parlamentarias para esclarecer lo ocurrido. Desde esta formación, se explica que "Se solicita datos sobre número de animales fallecidos, las causas, cuántas personas había encargadas de estos animales, si tenían reconocimiento veterinario y con qué periodicidad, en qué consistía el programa de la Consellería o -entre otras- en qué condiciones se mantenía a los burros".
En esta línea, el PP opina que estas muertes animales «han sucedido por la nula transparencia de la consellera Mollá a quien no es la primera vez que le ocurre algo similar». «Debería hacer un curso de buen trato a los animales. Sabemos que había malnutrición en los burros y el fallecimiento de, al menos, una decena de burros pero no se sabe qué ha pasado, ni quién era el responsable directo del cuidado de estos animales en esta iniciativa ni qué medidas de salubridad se habían establecido para estos animales», concluye Díaz, para quien la Conselleria de Agricultura «ha dejado morir a los burros de una manera salvaje, según parece por desnutrición o por un ataque».