Castellón vuelve a pronunciarse por la denominación bilingüe, por mayoría, entre el ‘odio’ al valencià, y el ‘respeto’ a todos los ciudadanos y sus derechos
El pleno ordinario de julio, del Ayuntamiento de Castellón, ha sido una sesión de constantes provocaciones, para promover una ruptura entre PP y VOX; salmos religiosos en una moción sobre la inmigración ilegal de menores; y un ‘feo’ monumental en la votación secreta para la Medalla de Oro a la Real Cofradía de Lledó, con dos votos en contra frente a la ‘unanimidad’ comprometida.
El pleno ordinario de julio, último antes de las vacaciones del mes de agosto, en el Ayuntamiento de Castellón, fue una sesión bronca donde las haya.
Los motivos no eran desconocidos para nadie. Tras la ruptura de VOX con el PP en las Cortes Valencianas, promovida desde el ejecutivo nacional de VOX, Compromís y PSOE se afanaron en poner sobre la mesa los mil y defectos del partido de Abascal, para lo que aprovecharon todos los temas y puntos habidos y por haber.
El concejal de Seguridad fue atacado en todos sus flancos, con el ruego común de PSOE y Compromís para que la alcaldesa cesara al concejal de Seguridad, un clásico ya en los plenos del Ayuntamiento.
Aprobado por mayoría el doble topónimo de Castelló/Castellón
Como ya era previsible, la propuesta para retornar al topónimo bilingüe de Castellón/Castelló se aprobaba por mayoría con los votos de PP y VOX.
Algunos partidarios del monolingüismo ocuparon parte de la sala entre el público, para aplaudir la intervención de los concejales Garcia, de Compromís, y Segura del PSOE.
Varios policías locales esperaban en la antesala del Ayuntamiento por si la cosa subía de tono y se ordenaba el desalojo de la sala. Pero, aunque el público no guardó el silencio requerido, la alcaldesa aguantó el tirón y finalmente la sangre no llegó al río. Una vez votado el dictamen, los discrepantes abandonaban la sala.
En lo que con cierne al topónimo de Castellón no mucho más que decir de todo lo que se ha vertido hasta ahora. Para Compromís y PSOE, se trata de un fenómeno de ‘odio’ al valenciano y las tradiciones.
Para VOX, una evolución natural del lenguaje que ha modificado el nombre de la ciudad a lo largo de los siglos desde su creación. Tal como Explicaba Alberto Vidal, tanto el castellano como el valenciano proceden de una raíz común, el latín, y la ‘n’ que se añade al castellanizar el nombre de Castelló, forma parte de un proceso de adaptación del lenguaje. Y para ejemplo, el nombre de Zaragoza, que procede de la denominación romana ‘Cesar Augusta’.
Durante el primer turno de intervención, la concejal de Cultura, María España tomó la palabra en nombre del PP; y Vicente Sales lo hacía también, pero en representación del equipo de gobierno.
Un detalle de bastante mal gusto en esta polémica, fueron las críticas al autor del informe que ha avalado la ‘recuperación’ del topónimo bilingüe. Pocas veces antes se ha atacado, como se ha hecho ahora, al ‘experto’ municipal, un catedrático con prestigio, por su versión a favor de ese topónimo bilingüe.
José Segura del PSOE habló incluso de equipos y de informes interesados. Y en las críticas de la oposición hubo mucho de expertos de primera o de segunda.
Los de primera, los que respaldaron a la coalición de PSOE, Compromís y Podem cuando decidieron que el nombre de la ciudad se quedara solo en su versión en valenciano. Y el de segunda, tercera o cuarta, el que ha osado oponerse a los primeros, para respaldar que ya en la edad media hubo un trasiego de documentos oficiales en los que la ciudad se refirió a sí misma con el nombre de Castellón.
Dicho de otra manera, que si ya la coalición de izquierdas contactó con sus ‘expertos’ para aprobar solo un topónimo en valenciano y aquello debía respaldarse porque eran hombres sabios; en este caso, pensar o tener documentación diferente convierte al catedrático que ha firmado el informe, poco menos que un incompetente… o eso es lo que piensan desde la oposición.
Se votó y se aprobó la doble denominación, que ahora deberá emprender un nuevo camino en la Generalitat Valenciana antes de que se apruebe o se rechace de forma definitiva.
‘El feo’ institucional a la real Cofradía de Lledó
Superada la polémica del topónimo llegó el momento de aprobar ‘los honores’ que la ciudad concederá en la fiesta del aniversario de la ciudad el 7 de septiembre.
Para empezar cabe destacar, que antes de llegar a pleno las propuestas de reconocimientos y honores pasan por la Jun ta de Portavoces. Y solo si se aprueban por unanimidad en esta Junta, llegan después al pleno municipal para ser ratificadas.
Las propuestas, respaldadas por la Junta de Portavoces, por unanimidad eran las siguientes:
Conceder la medalla de Oro de al Ciudad a la Real Cofradía de Nuestra Señora del Lledó.
Conceder la ‘Corbata de Honor’ de la ciudad al Centro Aragonés de Castellón.
Conceder la Corbata de Honor de la ciudad al Cuerpo Nacional de la Policía.
Pues bien, aunque en teoría todo estaba acordado previamente, atado y bien atado, sucedió que no, y hubo sorpresas.
Y es que la votación debía ser personal, concejal por concejal, y secreta. Para no prolongarla en el tiempo, se prepararon papeletas que incluían las tres propuestas, por separado. Después los ediles fueron nombrados y, uno por uno depositaron sus votos en la urna que ya había sido preparada a este efecto.
Posteriormente la alcaldesa extrajo las papeletas, cuyos resultados comunicó en voz alta, para pasarla después a la secretaria que daba fe de los resultados.
Y sucedió. Todos los asistentes votaron a favor de la concesión de las Corbatas de Honor para el Centro Aragonés y el Cuerpo Nacional de Policía, pero no ocurrió lo mismo con la Medalla de Oro de la ciudad a la Real Cofradía de Lledó, donde, sorprendentemente hubo dos pronunciamientos en contra. ¿Voto de conciencia o voto de venganza?
La alcaldesa recibió el resultado con evidente disgusto, nadie dio la cara y volaron los rumores…
Al tratarse de una mayoría cualificada, la Real Cofradía del Lledó recibirá la medalla de oro de la ciudad… ahora bien, la falta de unanimidad que se había comprometido en la Junta de Portavoces cantó ‘gregoriano’.
Moción Inmigración Ilegal de menores no acompañados
Para ser sinceros más que una moción fue una trampa. O si lo prefieren, una Declaración Institucional encubierta, que lejos de buscar una acción humanitaria solo persiguió poner el acento en las diferencias entre PP y VOX.
Como ya ha explicado este periódico en numerosas ocasiones, el reglamento municipal no permite presentar mociones cuyo cumplimiento no competan directamente a la entidad municipal. Cuando se dan estos casos, se transforman en Declaraciones Institucionales que, para llegar a pleno deben ser votadas unánimemente por todos los portavoces.
El Ayuntamiento de Castellón no tiene competencias sobre inmigración, por lo tanto, la base de la moción incumplía, no era la más correcta. Pero para forzar que se convirtiera en una moción de pleno se le agregaron algunas cosas, como que el Ayuntamiento ofreciera espacios a las instituciones para acoger a estos inmigrantes…
Y aquí se tocaron todas las fibras sensibles habidas y por haber. La verdad, visto lo visto, los que menos importaron fueron los inmigrantes en un debate de índole nacional que poco o nada venía a cuento.
El verdadero objeto era ver como PP y VOX se tiraban los trastos, todo ello disfrazado además con salmos religiosos de San Mateo, que haberlos ‘habíalos’ de todos los gestos y todos los colores…
Y todo para escuchar al concejal Ortolá refiriendo los acuerdos secretos de Sánchez con Marruecos, o los engaños de Núñez Feijóo a VOX.
Respondió Sales, por el PP, ‘sacudiéndose la pulgas’ al afirmar que los acuerdos con Sánchez son imposibles porque primero insulta y luego les pide el voto…
Un debate bastante desagradable… en el que Mónica Barabás afirmó que “escuchar a VOX es como escuchar a un pirómano explicar el Plan de Prevención de Incendios”. García volvió a pedir a Ortolá que abandone el equipo de gobierno. Y Ortolá, para quitarse el ‘san Benito’ de racista afirmó que dentro de sus altos dirigentes tienen ‘un mulato’.
Aunque Sales no se quedó atrás, acusó al PSOE de ser el partido de la Corrupción y planteó a VOX si de verdad eran patriotas o nacionalistas.
De verdad, ¿Hacía falta llegar a tanto?
En Ruegos y Preguntas Pau Sancho de Compromís cuestionó el funcionamiento del Patronato de Fiestas que dispone de su Consejo Rector como meras figuras decorativas… porque, indicó, realiza las convocatorias en el último momento con una absoluta falta de respeto a sus integrantes.
Por parte de Compromís y PSOE volvieron a incidir en solicitar a la alcaldesa la retirada de las funciones al concejal de Seguridad.