Este juego que recuerda al Pachinko japonés y al Pinball es un tipo de tragamonedas totalmente distinta, tanto por sus características gráficas como por su mecánica de funcionamiento.
Plinko no es una slot convencional con rodillos y símbolos que haya que combinar para obtener premios, ya que el juego se basa en una bola que cae desde arriba, y va rebotando aleatoriamente hasta llegar a una casilla inferior, dependiendo el éxito de la apuesta del recorrido que haga y el lugar en el que se deposite.
Como ocurre con las slots convencionales, es posible jugar a plinko dinero real o en partida de entrenamiento con el modo 'simulator' gratuito, algo que además sería especialmente recomendable, tanto para comprobar si el formato gusta como para familiarizarse con la mecánica de juego.
Características distintivas de Plinko
En las partidas 'free' y la existencia de recompensas en las jugadas con dinero acabarían los paralelismos con las tragamonedas al uso, al tratarse de una propuesta que es totalmente innovadora en todo lo demás.
Para empezar, el jugador puede configurar varios aspectos clave para personalizar su experiencia de juego. Así, tiene la oportunidad de elegir el nivel de riesgo entre bajo, medio y alto, con recompensas que irán en consonancia con el grado elegido. Igualmente, puede optar entre 8 o 15 casillas en la parte inferior y por lanzar la bola en modo manual o automático.
El protagonismo de la bolita y las casillas permite prescindir de símbolos, scatters y comodines, tan característicos de las slots tradicionales. Además, la simplicidad del juego hace que tampoco tenga una temática definida, como ocurre con la mayoría de tragamonedas actuales, cada vez más sofisticadas en este aspecto, al trasladar a mundos y universos muy variopintos.
En este sentido, es un juego mucho más simple y minimalista, aunque para ser más precisos cabría señalar que en realidad ofrece una experiencia visual diferente, con una pantalla diseñada como una pirámide de puntos blancos.
Esta simplicidad no es algo que vaya en su contra, por la sencilla razón de que es la esencia del juego lo que acaba importando. Solo así se entiende que el Tetris causase furor en su época cuando había otros juegos mucho más espectaculares.
Una clave básica que puede explicar el éxito de Plinko
En el Plinko cada lanzamiento puede dar lugar a resultados muy distintos debido a la aleatoriedad extrema generada por los obstáculos, pero esa imprevisibilidad en el fondo es consustancial también a las slots normales, con las que a lo sumo se puede elegir entre opciones con menor o mayor volatilidad. Esto es, escoger entre una tragamonedas que reparta más premios menos cuantiosos, u otra que recompense con menos frecuencia de manera más suculenta.
Lo que distingue a Plinko es que el usuario puede seguir el recorrido de la bolita, que a la postre determina el resultado y si va a recibir recompensas. Mientras que en las slots al uso el desenlace se produce de forma instantánea, sin que el jugador pueda seguir visualmente el proceso.
En las tragamonedas típicas sabemos el resultado final de la tirada, pero no es posible contemplar cómo se llega a él, ni tampoco ir anticipándolo por el recorrido de la bolita. Algo bastante interesante a nivel de experiencia de juego, más que por motivos de transparencia, toda vez que sabemos que los premios de cualquier tragaperras online son totalmente aleatorios de acuerdo a un RTP (return to player) preestablecido.
Fuentes de inspiración del Plinko
Al margen del cierto paralelismo que puede tener con el Tetris, el popular juego asiático del Pachinko también resulta un referente claro. Al igual que habría otros antecedentes como las múltiples versiones del Pinball, el juego legendario que consistía en lanzar una bolita que iba haciendo después un recorrido descendente rebotando en distintos obstáculos hasta caer en una casilla con premio o volver al punto de partida, donde se perdía si el jugador no conseguía modificar el recorrido con las palancas que accionaba mediante botones laterales. En tiempos pre-digitales en casi todos los bares de España de los 80 y 90 las máquinas de este tipo eran tan habituales como las hamburguesas, siendo de hecho anteriores incluso a los arcades.
Salvando las distancias, Plinko recoge esa esencia y la adapta al entorno digital, manteniendo intacta la emoción de ver cómo cualquier cambio en el recorrido de la bolita puede influir el resultado.
Que se haya lanzado este formato de juego demuestra la apuesta por la innovación permanente de las plataformas de casino online, por más que se opte por propuestas de acusada inspiración retro con un indudable encanto.
Asimismo, el éxito del Plinko también revela a las claras que para lanzar una propuesta atractiva no hace falta complicarse con ideas muy complejas, ya que en este ámbito a veces 'menos puede ser más' cuando la experiencia de juego que se propone tiene gancho.