Las denuncias se suman a las ya impuestas a tres casales en la semana posterior a los festejos en honor a la Mare de Déu del Roser.
Castellón Información
La Policía Local de Almassora ha denunciado en los últimos quince días a cuatro collas de la localidad por ruido y alboroto en vía pública tras generar quejas y molestias entre los residentes. “Somos conscientes de que la actividad en los casales no cesa con las fiestas. Efectivamente, en el periodo de celebraciones hay un lógico repunte, pero hay muchos locales que siguen estando activos a lo largo del año”.
Y prueba de ello, tal y como ha indicado Luis Martínez, primer teniente de alcalde en el Ayuntamiento de Almassora y concejal delegado de Policía Local, “son las quejas que periódicamente se reciben en el retén de vecinos que alertan del ruido, alboroto o suciedad que la actividad de algunos de estos locales provoca”.
Desde la Policía Local se realiza una labor de control y vigilancia “que no se circunscribe al periodo festivo. Se amplía a todo el año al objeto de velar por la debida convivencia”. Sin embargo, “en ocasiones esta situación deriva en quejas y malestar que los vecinos trasladan al consistorio por comportamientos incívicos o ruido excesivo con el que deben convivir”.
Durante la segunda quincena del mes de octubre, los agentes recibieron cerca de una decena de llamadas de ciudadanos quejándose de la actividad de los casales. Diseminados por toda la población, “hemos llegado a recibir quejas al mediodía y también entre semana, no necesariamente está vinculado a los fines de semana, aunque es cuando se registra una mayor actividad”, ha informado Martínez.
De todos los servicios realizados en atención estas quejas, en cuatro casos se acabó sancionando a las collas que ocupan estos locales. Una de ellas recibió dos sanciones, por lo que el número de denuncias emitidas se eleva a cinco, tal y como informan desde la Policía Local. En todos los casos, por alboroto y ruido, al igual que lo fueron las tres collas denunciadas en la semana inmediatamente posterior a los festejos en honor a la Mare de Déu del Roser.
Convivencia y respeto
Martínez ha recordado que “el disfrute y diversión en estos locales no tiene por qué generar molestias sobre los vecinos que residen en el entorno”. Por ello, “cualquier reunión de amigos, familiares... en los que conocemos como casales puede desarrollarse siempre y cuando su actividad no genere molestias sobre terceros, es decir, sobre los residentes”.
