Desde la crisis del 2008 hasta la actualidad, los productos financieros cuya demanda incrementa más en momentos de inestabilidad, son los minicréditos, con muchas personas solicitándolos incluso para los gastos más rutinarios.
Hace unos meses, la Asociación de Usuarios financieros (Asufin), en su "IV barómetro préstamos al consumo", reveló que el número de españoles que está solicitando préstamos para llegar a fin de mes habría incrementado significativamente en el último año. La demanda, en conjunto con la intención de solicitud, habría alcanzado niveles históricos.
Desde la crisis del 2008 hasta la actualidad, los productos financieros cuya demanda incrementa más en momentos de inestabilidad, son los minicréditos, con muchas personas solicitándolos incluso para los gastos más rutinarios.
Estos son algunos de los motivos por lo que este tipo de créditos crece en el país:
- Se utilizan para pagar otras deudas
Este tipo de préstamos suele ser utilizado para el pago de otras deudas pequeñas, creando un ciclo de deudas mediante el que los solicitantes tienen un flujo constante de dinero, así como un endeudamiento indefinido. Debido a que el importe es menor, muchos solicitantes lo consideran una deuda limitada y se permiten seguir solicitando más préstamos.
- Se entregan de forma inmediata
Otra de las ventajas de los minicréditos es que, debido a su bajo importe, suelen entregarse de forma prácticamente inmediata. De acuerdo a lo explicado en el blog del comparador PréstamosPerfectos, al no representar un riesgo grande para los bancos, la aprobación de los minicréditos en España suele darse en menos de 24 horas en promedio.
- Se pagan en poco tiempo
Por este mismo motivo, las entidades prestamistas suelen ser mucho más exigentes al momento de demandar el pago de la totalidad de la deuda, con el tiempo promedio siendo de entre una semana y un mes. De este modo, el cliente paga la deuda de forma casi inmediata, y es libre de seguir planificando sus finanzas de cara al futuro.
Riesgos de los minicréditos
Aunque los motivos anteriormente presentados muestren que se trata de productos sumamente útiles, también pueden ser muy riesgosos para quienes no cuentan con unas finanzas ordenadas o ingresos suficientes para hacer frente a sus deudas. En esencia, una de las principales desventajas de este tipo de préstamos es que son pequeños, incentivando a un endeudamiento excesivo.
Adicionalmente, se trata de préstamos mucho más costosos que el resto, con otro reporte de la Asufin asegurando que estos pueden ser hasta 46 veces más caros que las tarjetas de crédito, y cerca de 130 más que los préstamos al consumo tradicionales. Como media, encontraron que la mayoría de las entidades otorgaba estos créditos con una TAE superior al 3.300%.
Ya para el 2019 se demostró que estas “pequeñas” deudas, que se van acumulando con el paso del tiempo, incluso pueden limitar el acceso a financiamiento de mayor relevancia, como puede serlo una hipoteca. Esto se debe a que nuestro historial crediticio, aunque activo, genera desconfianza en las entidades bancarias.
¿Cómo evitar los riesgos?
Entonces, ¿Debemos evitar estos préstamos a toda costa? No, ya que es posible solicitar este tipo de productos sin poner en riesgo nuestra estabilidad financiera. Algunos consejos compartidos por los especialistas de PréstamosPerfectos son los siguientes:
- No solicitarlos si tenemos un alto nivel de endeudamiento, o si no contamos con un ingreso fijo que permita la estabilidad de nuestras finanzas.
- Solicitarlos solo si tenemos el dinero para amortizar la deuda en el periodo acordado.
- Comparar diferentes alternativas, sus intereses y condiciones.
- Acudir únicamente a entidades de mayor reputación para evitar prácticas abusivas o usurarias.
Aunque funcionales, los minicréditos están incrementando la deuda de los españoles, por lo que no deben utilizarse de forma irresponsable. La planificación financiera es esencial, no solo al momento de adquirir deudas “caras” como los minicréditos, sino también para hacer frente al contexto de inestabilidad que atravesamos actualmente.