Albergará exposiciones de renombre en colaboración con el Ayuntamiento, Defensa, la UJI y el Museo de Vilafamés
El edificio Moruno de PortCastelló ha sido objeto de una restauración para suprimir humedades y darle un lavado de cara que ya necesitaba. Será solo la primera intervención ya que posteriormente se quiere invertir para mejorar otros detalles como la acústica del interior.
El objetivo es convertirlo en una sala museo donde se celebren actos y exposiciones excepcionales, para las que se contará con la Delegación de Defensa de Castellón, la UJI y el Museo de Arte Contemporáneo de Vilafamés, además del Ayuntamiento de Castelló.
Caminos de hierro
La primera de esas exposiciones que ha inaugurado el Moruno, se ha dedicado a los ‘Caminos de Hierro’, los ferrocarriles que hicieron posible la construcción del Puerto de Castelló y la posterior comercialización de sus productos.
En la exposición no podían faltar los miembros de la Asociación Cultural Ferrocarril, Farja, que tiene su sede en Benicàssim y, por supuesto, tampoco, Juan Peris Torner, la persona que más ha escrito sobre la historia de los ferrocarriles de Castellón, junto con las autoridades del Puerto, de la ciudad y de las instituciones anteriormente citadas.
La exposición está estructurada en tres partes: La fotográfica, donde se muestran las distintas imágenes de la construcción del primitivo puerto a finales del siglo XIX, con la piedra que luego se extraería de la Cantera de les Serretes, al pie del cerro de la Magdalena, y aquel primer ferrocarril, fundamental para transportarla. El ferrocarril de les Serretes es la todavía existente línea ferroviaria de conexión entre el Puerto y la Estación de las Palmas, en la zona norte del Puerto.
Entre esas fotografías también se encuentran imágenes del Tranvía a Vapor de Onda al Grao de Castellón, conocido coloquialmente como la Panderola, y creado como un punto de conexión Inter comarcal desde los centros de producción agrario o cerámico hasta el Puerto de Castelló.
La segunda parte de la exposición recoge en vitrinas los documentos oficiales que dieron lugar a la creación el Puerto, su primitivo proyecto así como concesiones y publicaciones.
Y la tercera, son las maquetas de las antiguas máquinas a vapor y vehículos ferroviarios que también se exponen. Esos modelos a escala se encuentran dentro de la sala. En la Puerta del Moruno, un vagón de la Panderola, de madera, restaurado por la Asociación Cultural Ferrocarril, que habitualmente se guarda en el cocherón de Diputación.
Frente al edificio, el circuito férreo con las máquinas y vagones donde los más pequeños podrán disfrutar también de un viaje en su primer ‘ferrocarril’, también de la Asociación Cultural Ferrocarril.
El tren, como impulsor del desarrollo de Castelló y Portcastelló
Y es que el tren ha tenido un papel fundamental en el desarrollo de Castellón, pero también lo tuvo para hacer realidad un sueño que se gestaba desde mediados del siglo XIX: la construcción de un puerto ‘abrigado’ en la playa del Grau de Castelló (lo que ahora es el muelle de Costa).
Era la época de la revolución industrial, de la primera globalización que dio lugar a las manufacturas y empresas que necesitaban medios de transporte eficaces para importar materias primas y exportar sus productos comerciales.
En esta etapa fue cuando se proyectaron los ferrocarriles en Europa, cuando los caminos de hierro enlazaron ciudades y comarcas, cuando se proyectaron los primeros trenes que debían enlazar Madrid con el Puerto de Alicante… cuya iniciativa fue aprovechada también por la Sociedad Valenciana de Fomento para plantear una alternativa que uniera el Grao de Valencia con la Capital de Turia, y, después para prolongar la línea de Valencia a Xàtiva, Almansa y a Madrid.
La necesidad de enlazar Valencia con Barcelona daría lugar a la creación de la Línea Norte, y a la creación de Castelló como una ciudad con tren y estación propia en diciembre de 1862.
Castelló era una ciudad con tren que, además tenía una importante producción citrícola y una industria azulejera que empezaba a florecer en Onda. También se exportaban otros productos, como alpargatas.
Para dar salida a aquella producción se solicitó por activa y por pasiva la creación del Puerto de Castelló, concebido no solo como una rada con una pasarela de madera, sino un recinto portuario abrigado de los temporales donde se pudiera cargar y descargar mercancía.
Para la construcción del Puerto ‘abrigado’ mediante una escollera de piedra, se creó, no sin muchos problemas, la línea de les Serretes, que transportaba la piedra desde la cantera.
Pero para poder conectar los puntos de producción de la comarca y dar traslado a esa mercancía al Puerto de Castelló, se creó el Tranvía a Vapor de Onda al Grao, con parada en el centro de Castelló y Almassora, y posteriormente un ramal hasta el Puerto de Borriana.
Castelló y su Puerto no hubieran sido lo que son sin esas líneas de tren. Sobre ellas ha escrito sobradamente Juan Peris Torner. Tanto sobre el Ferrocarril de Les Serretes, como sobre la Panderola, estudio que fue premiado con el premio Humanidades del Ayuntamiento de Castelló.
Esta será la primera exposición del nuevo espacio del Moruno, pero no será la única.
El Edificio Moruno, como han anunciado tanto la alcaldesa como el delegado de Defensa, albergará una exposición muy ambiciosa sobre ‘el Lago azul español’, el océano Pacífico que fue conocido durante siglos con este sobrenombre, porque los españoles fueron los únicos que lo navegaron e incluso crearon la primera línea regular a través del Galeón Manila.
Pero además, el edificio Moruno colaborará con el Museo de Arte Contemporáneo de Vilafamés, para una exposición escultórica singular en la que participarán cuatro escultores y cuatro escultoras.
La alcaldesa de Castellón, amparo Marco, también ha recordado, que el edificio Moruno será el escenario de las conferencias de Novelaa histórica, durante la próxima edición de Escala a Castelló.
Marco ha anunciado también la próxima apertura del Museo de la Mar en la antigua Comandancia de Marina.