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El Grupo Municipal Popular avanza en las visitas programadas dentro de su Ruta Ciudadana y, recientemente, su portavoz, Begoña Carrasco, y la concejala Salomé Pradas, se trasladaron hasta el Centro Social Marillac de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, con el fin de conocer de primera mano, la labor social que allí desarrollan y recoger las propuestas de mejora, para ayudar a los más necesitados.
Carrasco ha asegurado que "la labor que las Hijas de la Caridad desarrollan en la sociedad castellonense es encomiable, trabajan para encauzar vidas desestructuradas, proporcionando los medios necesarios para que las personas vulnerables vuelvan a coger las riendas de su porvenir. Es un trabajo integral, que desde la administración pública local debemos apoyar".
La portavoz popular recuerda que estas voluntarias forman parte de la Mesa de las Personas sin Hogar, que lleva a cabo el Ayuntamiento, donde participan otras entidades sociales como Cáritas o Cruz Roja. "Y aunque aquí se trazan líneas de actuación conjunta, siempre se puede hacer más. Lo importante es aunar todos los recursos sociales existentes, apostando por un trabajo en red, donde quienes trabajan asistiendo a los más necesitados estén organizados y coordinados entre ellos, para garantizar el éxito de sus Programas de Intervención Social", añade Carrasco.
También ha apuntado que "esta sistematización de recursos y el trabajo en red es la principal demanda de las Hijas de la Caridad y, desde el Grupo Municipal Popular queremos hacernos eco de su reivindicación para estudiarla y valorar lo que se puede hacer desde las competencias que tiene el Ayuntamiento".
En su casa de acogida, las Hijas de la Caridad San Vidente de Paúl atienden a personas con vidas desestructuradas socialmente a causa de una enfermedad, soledad y carentes de todo apoyo familiar.
Para cada usuario elaboran un Plan de Intervención Personalizado. Se les atiende en materia sanitaria, proporcionándoles soporte y acompañamiento en todo el proceso de la enfermedad. Se encargan de administrar y supervisar tratamiento en coordinación y contacto permanente con los Hospitales y ambulatorios. Además, tramitan la documentación de cada persona, su cartilla sanitaria y, cuando ya están en disposición de valerse por sí mismos, se les ayuda a recuperar su autonomía personal.
Su obra social contempla la participación de estas personas en programas de formación para que puedan acceder al mercado laboral, siempre después de haber superado los obstáculos que produjeron un desvío en sus vidas.
Además, añade Carrasco, "queremos hacer un llamamiento a la solidaridad castellonense, para sumar voluntarios a la obra social Marillac, porque la voluntad y dedicación altruista de las personas con las personas, siempre es necesaria".
Donación solidaria
En la misma visita, la concejala popular, Salomé Pradas, aprovechó para donar su sueldo del Ayuntamiento, correspondiente a los dos últimos meses, a la obra social que desempeñan las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, cumpliendo así con su compromiso al inicio de la legislatura de destinar su retribución como concejala del Ayuntamiento a proyectos sociales de la ciudad de Castellón. La cantidad donada ha sido de 1.000 euros.