El pleno aprueba por mayoría requerir al Consell la anulación del cambio de topónimo en Villanueva de Castellón
Ya se han producido las primeras confusiones administrativas por la existencia de dos ‘Castelló’ en la Comunitat Valenciana. Así lo ha afirmado Omar Braina en el pleno de hoy. Confusiones producidas, de momento, en documentación remitida desde las consellerias de Sanidad o Educación. El pleno de hoy ha aprobado con los votos en contra de Compromís y la abstención de Podem, requerir al Consell para que anule la coincidencia de topónimos en Castellón y en Valencia, y la alcaldesa ha sido tajante, “Esto no es en contra del valenciano”
Esperanza Molina/ Castellón Información
Pleno intenso en el Ayuntamiento de Castelló, que al final se ha celebrado de forma telemática a propuesta de todos los portavoces, por unanimidad.
Y lo mejor de toda la sesión ha sido el debate producido cuando se ha presentado la propuesta de la alcaldesa para solicitar al Consell que revoque o anule el cambio de denominación de Villanueva de Castelló, para evitar la coincidencia de dos ‘Castelló’ en la Comunitat Valenciana y, en su caso, la presentación de un recurso contencioso administrativo para rectificarlo
La propuesta de la alcaldesa era la manzana de la discordia que situaba al Grupo Socialista frente a sus socios, que no han respaldado la iniciativa, y que ha salido adelante con los apoyos de toda la oposición.
El primer detalle, ha sido que cada grupo defendía lo suyo, o dicho de otra forma, el equipo de gobierno no ha presentado frente común con una sola intervención. El segundo, que como era de esperar, desde la oposición se han aprovechado las discrepancias para poner de manifiesto un nuevo capítulo de ‘las desavenencias del Fadrell’.
Luciano Ferrer (VOX) pide a Marco que rompa con el Acuerdo de Fadrell
Por orden de aparición, el portavoz de VOX, Luciano Ferrer, ha basado su intervención en la defensa de la alcaldesa y su grupo, el PSOE, para que rompa sus acuerdos con sus socios. Posteriormente ha explicado por qué Villanueva de Castelló ha tenido muchos topónimos a lo largo de su historia, y ha conseguido ahora un consenso para ser ‘Castelló’, porque la propuesta ha sido realizada por la el gobierno de este municipio de Valencia, ‘Gente de Castellón y su Izquierda’ es filial de Compromís, y ha matizado en tono irónico: “Son capaces de cambiar el nombre al pueblo y no de modificar el suyo al valenciano”. Y finalmente, ha pedido que se recupere el doble topónimo de la capital de la Plana, en español y en valenciano, "que modificaron con mentiras". “Sra alcaldesa tendrá el voto de la derecha si vuelve a recuperar el doble topónimo, sea valiente”.
Mezquita: "La campaña está promovida por los enemigos del valenciano"
A continuación, intervenía Francesc Mezquita, de Compromís. Su alocución ha sido muy despectiva para con la propuesta y sus apoyos porque “Esto es una pérdida de tiempo y la polémica no tendrá ningún recorrido”.
Y ha añadido después que no era ninguna casualidad que se hubieran sumado PP, CS y VOX en la defensa de esta propuesta porque "eran enemigos del valenciano”.
A continuación, se ha identificado como historiador y profesor, y ha considerado la capacidad de los expertos de la Agència Valenciana de la Llèngua (AVL), como filólogos, a los que ha mostrado su respeto. Y ha concluido con que deben trabajar en cosas importantes en beneficio de los ciudadanos y no en este tema.
Marín-Buck: "Dejen de meterse en camisa de 11 varas y de enmerdar la vida de los ciudadanos”
El portavoz de Ciudadanos, Alejandro Marín-Buck se ha tirado a la yugular de Compromís, y más aún de Ignasi Garcia, de los que ha dicho que "solo saben enervar a la sociedad y buscar conflictos donde no los hay", como los de la Cruz del Ribalta, o la propuesta que redujo solo a su denominación al valenciano el nombre de la capital de la Plana cuando el doble topónimo no generaba conflictos en Castelló. “¿Qué ha ganado con esto?. Ha incidido en las diferencias internas del Acuerdo de Fadrell: “Sra alcaldesa, otro traje más que le han hecho sus socios. A este paso debe tener todo un armario”.
Y ha concluido con una reflexión en voz alta: “Dejen de meterse en camisa de 11 varas y de enmerdar la vida de los ciudadanos”.
Ignasi Garcia intentó intervenir por alusiones, pero Marco lo cortó en seco: "si quiere intervenir entre en el debate”. A lo que Garcia renunció pero señaló que palabras como la de ‘enmerdar’ que había pronunciado el portavoz de Ciudadanos no eran propias de un pleno, y solicitó a la alcaldesa que le pidiera a Marín -Buck que rectificara.
Sales: “Desgraciadamente optaron ustedes por el conflicto y ahora sufren su propia medicina”.
Y el pleno siguió con el posicionamiento del PP, que defendió Vicent Sales, que apoyó la reflexión de Ciudadanos, porque dijo que "hay quien necesita generar polémica para mantenerse, porque sin ella desaparecería del mapa”.
Sales criticó la campaña de Compromís con la que suprimió el doble topónimo para que fuera solo en valenciano, y el dinero gastado en aquella campaña de ‘el nom és Castelló'. Apeló a la sensibilidad de Vicente Marzà y Ximo Puig como castellonenses. Cuestionó la decisión del Consell en cuanto al reconocimiento del municipio de la Ribera en base a su historia, porque ese municipio de la Ribera ha cambiado numerosas veces de nombre… y ha defendido las raíces del nombre de Castelló.
Finalmente, también reivindicó la doble denominación de la capital de la plana en sus dos lenguas oficiales, amparada por la ONU, y por Europa. “Desgraciadamente optaron ustedes por el conflicto y ahora sufren su propia medicina”.
Omar Braina: “La solución de los conflictos vecinales de otro municipio no tiene por qué perjudicar a nuestro Castelló”
Y Remató Omar Braina, en nombre del PSOE, que realizó el mejor discurso de su vida. Después de quitar hierro a las discrepancias internas del Acuerdo de Fadrell, y manifiestar que el requerimiento no pretendía promover un enfrentamiento con el Consell ni con la Generalitat, manifestó que la existencia de dos ‘Castelló’ en la misma Comunitat Valenciana ya estaba dando lugar a confusiones. Confusiones de carácter administrativo en la emisión de documentos de varias consellerias, entre ellas la de Educación y Sanidad.
Defendió el derecho de la capital de la Plana tener como único el topónimo de Castelló, porque forma parte de su identidad y tiene derecho a ello.
Respaldó la aprobación, en su día del topónimo de la capital: “el nom es Castelló, antes y ahora y tiene legítimo derecho a no coincidir en su denominación oficial con otro municipio de la Comunitat Valenciana".
Hace nueve años, mencionó, la AVL aprobaba la propuesta para la denominación de Villanueva de Castellón en Valencia ¿Qué ha cambiado ahora? Es cierto, dijo, que él no es lingüista, pero si hace 9 años se consideró legítima aquella denominación del municipio valenciano, ahora no es el momento de rectificar y justificarlo que es para solucionar las disputas de sus vecinos… “La solución de los conflictos vecinales de otro municipio no tiene por qué perjudicar a nuestro Castelló”.
Turno de réplica
En el turno de réplica, Vox aplaudió los razonamientos de Omar Braina, pero insistió en recuperar también el nombre de la ciudad ‘en español’.
Francesc Mezquita atacó a Marín-Buck de Ciudadanos, “A ustedes no les interesa la ciudad ni el valenciano”, y también acusó a quienes defendían la propuesta de no haber realizado el debate en valenciano.
Marín-Buck: "en valenciano se usa la palabra enmerdar"
Cuando le tocó a Marín-Buck, de Ciudadanos, la alcaldesa, con mucha suavidad, si que le pidió que buscara otras palabras o sinónimos en sus expresiones.
El portavoz naranja no se cortó un pelo “En mi reflexión había pensado utilizar la palabra ensuciar (para referirse a las campañas de Compromís), pero he utilizado la de ‘enmerdar’, porque es la que más se hubiera utilizado en valenciano”.
Braina: “El PSOE de Castelló es capaz de anteponer los intereses de Castelló por delante de las siglas"
Sales insistió en la historia y Omar Braina, volvió a aludir a los problemas de confusión que genera el mismo topónimo en dos municipios de una misma Comunitat y además sentenció: “El PSOE de Castelló es capaz de anteponer los intereses de Castelló por delante de las siglas".
Acabado el debate entró al trapo la alcaldesa, Amparo Marco. A Rafa Mezquita le reprochó que calificar a a quienes apoyaban aquella propuesta como enemigos del valenciano. La propuesta "la presenté yo, dijo, y usted sabe que yo soy de Castelló, o de Castellón, porque puedo usar libremente las dos denominaciones aunque una de ellas se la oficial, y yo no odio el valenciano”.
Y todavía añadió, que el uso de ‘Comunitat Valenciana’, fue una propuesta de PSOE y del PP, recogido en el Estatuto de la Comunitat Valenciana.
Y sin más se votó y el resultado fue el esperado. A favor de que el Consell revoque o anule el nuevo topónimo del municipio de la Ribera, y en su caso presentar un recurso contencioso administrativo: PSOE, PP, CS y VOX. En contra, Compromís. Podem se abstuvo.
Rafa Simó, protagonista de las ordenanzas Fiscales
En pleno hubo mucho más, como la aprobación de las nuevas ordenanzas fiscales, entre ellas las del IBI, que se mantendrá en un 0,69% para todos los ciudadanos y se incrementará en 0,5 puntos (55.000 euros) para el puerto.
Y se crea o no, Simó, presidente de la Autoridad Portuaria estuvo en todas las bocas y fue el protagonista de todos los comentarios. Los que recordaban que también él votó a favor de subir los impuestos al Puerto cuando era concejal, y los que reprochaban que se le hubieran subido los impuestos ahora a la entidad portuaria, limitando la competitividad de esta infraestructura…
PP y Ciudadanos defendieron una rebaja de la presión fiscal para potenciar la economía y aludieron a la difícil situación que atraviesa la ciudad. Compromís y Podem, se posicionaron en el otro extremo. En medio se quedó el PSOE, que intentó no salir escamado con su posicionamiento. García de Compromís defendió que Rafa Simó no se opondría si fuera concejal a esta subida, porque sabe que como Ayuntamiento no es cuestión de porcentaje, y que la ciudad necesita compensar el descenso de ingresos. En este sentido habló de los retos que tiene por delante el Puerto.
El concejal socialista David Donate solo dijo que Simó no pidió que se rebajaran los impuestos del Puerto durante su investidura, ni lo hubiera votado en contra ahora, en el Ayuntameinto.
Rechazada la moción de VOX para apoyar al Comercio
En Despacho Extraordinario se rechazó la moción propuesta por VOX, para ayudar al comercio de la ciudad que basó en cinco puntos: confianza, credibilidad, credibilidad jurídica, sentido ciudadano y visión a medio y largo plazo, que dijo, este equipo de gobierno no ha generado. Lo apoyaron PP y CS, pero no los socios de Fadrell. David Donate señaló que su departamento trabaja en estrecha colaboración con los representantes del Comercio para activar y poner en marcha diferentes campañas, y enumeró algunas de las acciones realizadas desde su departamento.
Se rechazó con los votos de PSOE, Compromís y Podem.
Ciudadanos: equiparar ayudas a los colectivos de gente mayor
Tampoco salió adelante la moción de Ciudadanos para equiparar las ayudas a los colectivos de gente mayor. Isabel Granero defendió su área y su gestión que estaba basada en las decisiones del Consejo de la Tercera Edad.
Lo apoyaron PP y VOX, pero se rechazó con los votos de PSOE, Compromís y Podem.
Unanimidad para apoyar la supervivencia del ocio nocturno
Y si salió adelante la moción de PP y Ciudadanos para promover soluciones al sector del ocio nocturno.
La defendieron Esteban Ventura y Begoña Carrasco. En ambos casos reiteraron la difícil situación que vive el sector, los largos meses con las puertas cerradas, la falta de ayudas, y la necesidad de soluciones.
El concejal socialista Jorge Ribes anunció que la iban a votar a favor, pero recordó también que no había estado de brazos cruzados y se había reunido con el colectivo en varias ocasiones.
La alternativa pasa por permitir a este sector que pueda abrir con horario diurno sin perder sus licencias de ocio nocturno.
Ciudadanos se quedó solo con la suspensión cautelar de la ZAS
En último lugar, en cuanto a mociones, se abordó la planteada por Ciudadanos en la que pedía la paralización cautelar de todos los decretos de la zona ZAS porque todas las medidas adoptadas desde el año 2010 parten de un decreto de medición que no cumplió la doble medición acústica, estatal y autonómica.
Marín Buck avisó que el Ayuntamiento podría estar incurriendo en prevaricación desde 2010. Aquel decreto, dijo, ya estaría caducado, pero no el último de 2018.
Jorge Ribes, por parte del equipo de Gobierno manifiesto que Ciudadanos había mezclado cosas y departamentos técnicos, por lo que parte de sus afirmaciones no tenían sentido o no aportaban soluciones.
Defendió el acuerdo al que llegó el ayuntamiento con los empresarios de la plaza Santa Clara, para poder modificar la ordenanza que limita sus mesas y sillas exteriores en las terrazas durante el periodo en que se estudiarán las alegaciones que estos presentaron.
Solo Ciudadanos votó su moción. PSOE, Compromís y Podem votaron en contra y se abstuvieron PP y VOX.