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El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha condenado hoy al exconseller y exdiputado del PP Rafael Blasco a ocho años de cárcel y 20 de inhabilitación por la pieza del llmado caso Cooperación. Estas penas responden a los delitos de tráfico de influencias, prevaricación, falsedad documental y malversación de caudales públicos.
La sentencia considera probado el trato de favor al empresario Augusto César Tauroni y a la Fundación Cultural y de Estudios Sociales, a la que la Conselleria de Cooperación adjudicó, cuando Blasco era el máximo titular de la misma, 1,8 millones de euros para proyectos en Nicaragua, de los cuales solo 43.000 euros llegaron a su destino, mientras que el resto se invirtió en comprar pisos y garajes en Valencia.
El propio Tauroni, único encarcelado de los diez imputados, ha sido condenado a las mismas penas que Blasco, y solo Josep María Felip, exdiretor general de Inmigración y Cooperación, no ha sido condenado a prisión, sino a cumplir siete años de inhabilitación por prevaricación administrativa.
La secretaria general administrativa de la Conselleria, Tina Sanjuán, deberá cumplir siete años y medio de prisión y 17 y medio de inhabilitación por prevaricación, malversación y falsedad. Por los mismo delitos ha sido condenado a cuatro años y medio de cárcel el exjefe de Solidaridad, Marc Llinares. El ex subsecretario de la Conselleria, Alejandro Català, cumplirá cuatro años y medio de cárcel, siete de inhabilitación y pagará 6.750 euros de multa por prevaricación administrativa en concurso, y el exjefe de Gabinete de Blasco, Javier Llopis, deberá cumplir tres años de prisión, dos de inhabilitación y pagar una multa de 2.700 euros.
