La Asociación Ciudadana contra el SIDA de Castellón y provincia (CASDA) lleva 16 años trabajando en la prevención y concienciación de esta enfermedad. Tiene programas de actuación e intervención con usuarios de drogas, prostitutas, jóvenes y población en general.
Los casos de contagios de VIH entre los chicos jóvenes que mantienen sexo con hombres están aumentando. La explicación, según la Asociación ciudadana contra el SIDA de Castellón y Provincia (CASDA), es que “la generación que ahora ronda los 20 años “no ha vivido la época más cruda del SIDA y parece que ven la afección como una enfermedad crónica de la que ya no te mueres y no son conscientes de la gravedad”.
Por eso, esta ONG está actuando ahora en dos concurridos puntos de cruixing, (intercambio de sexo entre hombres), ubicados en Castellón y Vila-real para concienciar a los usuarios más jóvenes del alcance del VIH la vital importancia de su prevención.
Así, a los programas de prevención de enfermedades sexuales entre prostitutas, las unidades móviles para intercambio de jeringas y sobre todo las charlas en los institutos sobre concienciación y educación sexual, se suma un nuevo frente de chicos jóvenes que parecen no temer el contagio. “Es que estamos hablando de chicos de apenas 21 años que ya no han conocido la repercusión social y mediática que tuvo la epidemia en los años 80 y a los que la única información que les ha llegado es que de SIDA ya no te mueres”, comenta la presidenta de CASDA, Maria José Calero.
Aunque no hay cifras anteriores para comparar porque el registro sanitario se creo en el 2010, “en poco más de año y medio se han detectado 309 nuevos casos de infecciones en la Comunitat Valenciana, lo que suponen 16 nuevos contagios al mes”, añade Calero.
Menos atenciones a prostitutas
Por otro lado, la cifra de actuaciones con prostitutas ha descendido notablemente en el último año, “en toda la zona del Caminàs aunque ha aumentado considerablemente en la N-340 en el norte de la provincia, porque muchas de las que estaban en el término de Tarragona al cambiar las normativas catalanas han bajado hacia en norte de la provincia”, explican desde CASDA. No obstante, el balance global de estas actuaciones de atención e intervención, ronda la cifra de 250 mujeres frente a las 500 usuarias habituales de años anteriores.
Rosanna Blasco
