La cancelación del evento a pie de calle ha supuesto un incremento de las reservas en pleno parón de la temporada turística
M.G./Castellón Información
Será un Día de las Paellas diferente en Benicàssim. Omicron ha lastrado una celebración marcada en rojo en el calendario festivo de los benicenses y ciudadanos de los municipios de los alrededores.
Pero que no se celebren colectivamente no empaña que esta festividad no se pueda llevar a cabo. Aparte de las quedadas para cocinar las tradicionales paellas en casas y villas, los que han aprovechado la cancelación de la actividad en la calle han sido los restaurantes de la localidad.
La mayoría de ellos ya no cuentan con plazas disponibles para disfrutar de la receta más valenciana por antonomasia, tal y como indican a este medio fuentes de la patronal Ashotur. De hecho, muchos de ellos, la mayoría ubicados en el casco antiguo de la localidad, ya han colgado el cartel de 'Lleno' para el próximo viernes.
La gran mayoría no abren a mediodía durante el mes de enero, pero aprovecharán la oportunidad para cocinar un menú que incluye un plato de paella para que la fiesta sea lo menos diferente posible a lo que están acostumbrados los benicenses. Los precios oscilan entre los 15 y los 30 euros.
La Fiesta de las Paellas se adapta así a la Covid y se transforman, un año más, en unas jornadas gastronómicas para dar impulso a la restauración local en plena temporada baja del turismo.