Enrique Domínguez. Economista
Esa es la cuestión. Pero ya llegaremos al porqué del título de este comentario puesto que el comportamiento del paro registrado en este mes de enero ha sido de lo más normal en los últimos años. Desde 1995, solamente hubo un año, 1998, en el que el total de personas paradas se redujo respecto al mes precedente. Y hay que añadir que las 1.341 personas de incremento es la menor cifra que se da en un mes de enero desde 2017.
Sí que es importante señalar que, en términos porcentuales, el aumento del paro registrado en Castelló es superior al del conjunto de la Comunitat Valenciana (CV) y España respecto a diciembre de 2020, mientras el incremento respecto a enero de 2020 es inferior al manifestado en esas dos áreas.
El desglose de las personas paradas por sexos constata y confirma que el paro masculino continúa siendo inferior al femenino (es el 41,42% del total), aunque sube casi medio punto respecto al del mes precedente. Ello me permite apuntar que el dato de la EPA del cuarto trimestre, recientemente publicado, que señalaba que el paro masculino suponía el 50,5% del total en ese periodo, no concuerda con la evolución del paro registrado en ese trimestre (40,9% de media).
En este mes de enero, la práctica totalidad de las personas paradas se han dado en el sector servicios, sobre todo en el relacionado con la hostelería, por el cierre de su actividad. Es importante destacar, no obstante, que industria y construcción apenas han registrado variaciones en la cifra de parados, aumentando algo en agricultura y disminuyendo entre las personas sin empleo anterior. Es significativo indicar que esa evolución sectorial ha sido similar a la manifestada en enero de 2020, antes de la pandemia.
También es reseñable el aumento del peso del paro extranjero sobre el total en todas las áreas analizadas, tanto respecto a doce meses antes como al mes precedente. En Castelló el peso del paro extranjero en este enero es casi diez puntos superior al de la CV (el 27,44% frente al 17,93%).
Nos vamos acercando al porqué del título de este comentario. En este primer mes de 2021 el total de contratos formalizados en la provincia se ha incrementado en casi dos puntos (el 1,96%) respecto al total del mes anterior, mientras en la CV el retroceso es del 9,15%, más en València que en Alacant, y en España del 3,89%.
Y es significativo que el número de contratos de este mes de enero sea un 5,94% inferior al de enero de 2020, lo que implica que Castelló sea la provincia en la que menos han descendido los contratos. Un año antes fue la octava con mayor descenso porcentual de contratos sobre enero de 2019.
No creo que este comportamiento de la contratación en este mes quiera indicar una mejor predisposición de la provincia de cara al incierto proceso de paulatina recuperación de la actividad, dada la marcada estacionalidad de nuestra economía provincial, que este año no va a contar con el efecto positivo de la semana santa y del comienzo de la primavera.
Y llegamos al por qué del titulo del comentario: la provincia de Castelló, que durante enero de 2020 y de todo este año se ha situado como la quinta provincia con más contratación indefinida formalizada (superior al 14%), en este mes de enero de 2021 baja cuatro puntos, hasta el 10,64% y se sitúa como la 21ª provincia en el ranking estatal.
Si es algo puntual o algo que ha venido para quedarse, lo veremos en los próximos meses. ¿La inseguridad de la evolución de la pandemia en este mes puede haber originado contratar más temporalmente y menos a tiempo parcial? Esperemos que solamente este hecho sea debido a la dureza de la pandemia en este mes. ¿Y usted qué opina?