Vicente Pallarés. Alcalde de Sant Joan de Moró y diputado provincial
Juan García Ripollés, el genial Ripo, no nació en Sant Joan de Moró, pero es un moronero más. Un vecino que ama a nuestro pueblo – que es el suyo-, que está profundamente vinculado con la vida diaria del municipio a todos los niveles y que siempre, haciendo gala de su inmensa generosidad, atiende las peticiones del Ayuntamiento cada vez que solicitamos su colaboración. Siempre responde con amabilidad y de manera afirmativa cuando requerimos de su presencia o de su arte –que viene a ser la misma cosa- para prestigiar cualquier tipo de actividad.
Ripollés es un moronero más. Un moronero de Mas de Flors, hermoso rincón de nuestra geografía municipal, en el que el pintor y escultor ha instalado su cuartel artístico, en el que crea las peculiares figuras de su singular mundo, y que ha convertido en lugar de peregrinaje obligado para todos los amantes de su arte, tanto de España como de otros muchos países.
Sant Joan de Moró admira, quiere y respeta a Ripo. Y por eso, en el año 2013, y en mi condición de alcalde, tomé la decisión de nombrar a Ripollés como Hijo Adoptivo de la localidad, una iniciativa que fue aplaudida de manera unánime por todos los vecinos. Y ahora, coincidiendo con la celebración del 31 aniversario de la constitución de Moró como municipio independiente, vamos a inaugurar en la plaza que lleva su nombre una estatua de dos metros que, día tras día, nos recordará su grandeza como artista y como persona. Y dentro de unos meses, como parte de este mismo homenaje, también se instalará otra estatua prácticamente idéntica en Mas de Flors, aunque de dimensiones más reducidas. Es el regalo de Sant Joan de Moró, su pueblo, a Juan García Ripollés con motivo de su inminente 90 cumpleaños.
Ripo es, para todos nosotros, un moronero más.