Los vecinos afirman que el expediente de la cruz es nulo que la concejal ha antepuesto sus intereses personales a los públicos
La concejal de Cultura, Verónica Ruiz, ha desestimado las dos recusaciones presentadas por dos asociaciones de vecinos, contra su gestión en el decreto de la retirada de la Cruz del Ribalta. Ruiz afirma que no tiene ningún interés personal que pueda poner en peligro la tramitación de este expediente y espera que, según marcan los trámites administrativos, la alcaldesa la respalde también en este tema, de forma que no sea necesario convocar al pleno de la Corporación.
EM/ Castellón Información
Dos asociaciones vecinales de Castellón han presentado documentación en el ayuntamiento para ‘recusar’ a la concejal de Cultura Verónica Ruiz, en su gestión del expediente de la retirada de la Cruz del Ribalta.
Ambas recusaciones se produjeron en el marco del periodo de exposición pública y presentación de alegaciones del expediente de retirada de la Cruz.
Una de estas recusaciones, presentada por la Asociación Verge de Lledo, alega contra el expediente de retirada de la Cruz en atención a que:
“La Cruz de los Caídos del Parque Ribalta de Castellón no tiene existencia física y jurídica, por lo que resulta imposible retirar lo que no tiene presencia material o inmaterial alguna”.
Esta reflexión se basa en el hecho de que la Cruz del Ribalta es un monumento dedicado a las víctimas de la violencia, tal y como acordó el Ayuntamiento de Castellón en sesión plenaria en 1979. Por lo tanto, si lo que se desea es retirar la Cruz del parque, denominándola Cruz de los Caídos, el Ayuntamiento debería revocar el acuerdo de 1979, con otro acuerdo plenario, que reconociera este nombre que ahora se le da, y su significado.
La alegación alude también a las medidas cautelares dictadas por la justicia, que paralizan cualquier inversión destinada a la retirada de la Cruz, en tanto no se resuelva la concepción judicial de este monumento.
En el folio tres de la alegación, también se rechaza la aplicación e la Ley de Memoria Histórica en este caso, ya que frente al citado monumento no se han realizado exaltaciones franquistas, tal como confirmó en su momento un informe de la subdelegación del Gobierno.
Por todo ello, la alegación presentada solicita el archivo del expediente que se tramita, pero además pide la recusación de la concejal de Cultura, por las numerosas declaraciones realizadas en la que afirma que el tema de la Cruz es de su ‘interés personal’, por lo que la gestión realizada no se ajusta al interés público sino a los suyos personales “para lo cual, el procedimiento es un mero trámite cuyo resultado en sede administrativa ya se anticipa y ello sin tener aun las alegaciones que puedan presentarse en tiempo y forma”.
Por todo ello, finaliza el escrito: “solicito expresamente la recusación de la Sra. Concejala de Cultura Dña Verónica Ruiz Escrig, y para cuya resolución deberán seguirse los trámites previstos en la legalidad vigente y ser resuelta bien por el pleno, bien por la señora alcaldesa presidenta”.
Así las cosas, la concejal e Cultura, Verónica Ruiz admitía esta mañana la presentación de las dos recusaciones, que dijo, ya había procedido a contestar.
Ruiz Considera que no es preceptivo que ambas recusaciones tengan que pasar por el pleno del Ayuntamiento, y que bastaría con que se pronunciara la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, como presidenta de la Corporación.
Y en este sentido, la concejal de Cultura no tiene duda de que Amparo Marco la respaldará en el rechazo de la recusación. “no tengo la menor duda”.
La pregunta ahora es: ¿Hasta qué punto le puede interesar a la alcaldesa Amparo Marco, candidata a la alcaldía en las elecciones del 26 de mayo, volver a meterse en ese jardín?