El pasado viernes se celebró el último pleno de la Diputación Provincial, dando por finalizada así la legislatura 2019-2023. Quiero dar las GRACIAS, en mayúscula. Gracias a todas las personas que me han acompañado en este camino y de las que he aprendido tanto: Asesores, Ramón Grau, Jordi García, Andrea Manrique, Manu Vives y Lourdes Barberán; y a los que, desde un plano sin visibilidad, me han ayudado siempre con sus consejos y conocimientos para hacer mejor mi trabajo. Gracias a mis compañer@s de partido, los de verdad, y con los que mantendré una amistad de por vida, incluyendo a los que en su día se fueron.
Gracias a los medios de comunicación, que han querido y sabido transmitir mis opiniones, mis propuestas, y de los que siempre he recibido un magnífico trato. Gracias a mi familia, que ha tenido que aprender a renunciar a pasar tiempo conmigo y a sobre llevar mis ausencias. Y permitidme que el gracias mayor sea para todos esos votantes que, en algún momento, se sintieron huérfanos y vieron que la moderación era la respuesta política más acertada.
He dado lo mejor de mí, con ganas y con entusiasmo, y todo esfuerzo habrá merecido la pena si esa semilla plantada y cultivada durante 8 años permite que mis hijos y los de toda nuestra generación tengan un futuro mejor. Siempre he reivindicado que en política hay que saber cuándo marcharse. Con coherencia, me lo aplico a mí misma. En las pasadas elecciones municipales recibí un apoyo por encima de la media del partido, pero no fue suficiente. La ciudadanía decidió que era el momento de la marcha, y me marcho.
Acabo así una etapa que empezó hace casi una década, y que ha permitido que, a través de unas siglas, pudiera dar altavoz y defender las necesidades de mis vecinos. Dedicarse a la política es mucho más que recoger un acta, tener representación o estar en primera línea. Dedicarse a la política es una forma de vivir comprometida con las personas que te rodean y tratar de hacer mejor el lugar en el que vives, y hay muchos medios para ello.
Yo nunca dejaré de intentar que la vida de la ciudadanía sea mejor, me dedique a lo que me dedique, esté en el lugar que esté. Deseo mucho acierto a quienes se quedan al mando, y el mejor consejo que les puedo dar es que es necesario apostar por el diálogo y por todos esos valores que siempre he intentado defender a través de unas siglas, y que me enseñó en mis inicios un gran líder como Albert Rivera: hablar con todos siempre, llegar a acuerdos, y defender a los ciudadanos por encima de todo, por encima de tu partido y por encima de ti misma. Retomo las gracias en mayúscula con las que inicié este texto, para darlas de nuevo por la maravillosa experiencia que he vivido, y que me brindaron tantos y tantos ciudadanos con su confianza y su voto.
Durante 8 años me han permitido adquirir unos conocimientos inigualables, aprender sobre el día a día de lo que ocurre en mi municipio y en mi provincia. Lo agradezco de corazón. Ahora, lo honesto, lo que toca, es saber marcharse. Con la misma libertad y valentía con la que llegué, pongo mis cargos orgánicos a disposición del partido. Me despido libre y agradecida.