Se trata del trastorno nutricional más común ya que afecta a más del 30% de la población por lo que hay que estar atento a los cambios en nuestro organismo
Castellón Información
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la carencia de hierro, o ferropenia, es el trastorno nutricional más común y extendido en todo el planeta y afecta a más del 30% de la población mundial, principalmente a niños y mujeres.
Con los cambios de estación, esta deficiencia ferropénica puede aumentar. Tal como indica el doctor Jesús Recio, responsable de la unidad de medicina interna del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, "los cambios de estación alteran nuestro organismo; hay que cuidarse antes de que llegue el calor y procurar comer y dormir bien así como realizar un poco de ejercicio diario al aire libre. Se debe tener en cuenta que en la población femenina la anemia puede verse aumentada por los sangrados menstruales abundantes y en las mujeres embarazadas por la demanda de nutrientes del feto".
Algunos de los síntomas indicadores de una anemia ferropénica suelen ser cansancio, dolor de cabeza, caída del cabello, palidez, falta de concentración, mareos o somnolencia. Una patología que se produce por la deficiencia de hierro, mineral necesario para la formación de hemoglobina que a su vez lleva oxígeno al cerebro. "Es recomendable, -subraya el especialista-, normalizar los niveles de hemoglobina con tratamiento farmacológico vía oral o intravenosa y una dieta basada en una alimentación rica en frutas y verduras y que incluya una ración de carne o pescado dos o tres veces por semana".
Lo más importante es brindar un tratamiento individualizado para cubrir las necesidades del paciente y para corregir el padecimiento de base, "por ejemplo, -comenta el doctor Recio-, si se cuenta con un sangrado menstrual abundante, acudir al ginecólogo para regularlo o si se detecta que el paciente podría presentar hemorragia en el tracto digestivo como consecuencia de una úlcera péptica, acudir al especialista de digestivo. Es decir, que la anemia en ocasiones puede ser inofensiva o ser resultado de una enfermedad o afección subyacente. Por esta razón es muy importante saber las causas que la provocan".
Alimentación
Se deben controlar los niveles de ácido fólico, vitamina B12 y proteínas y acudir al médico en caso de que se presenten estos indicios. "Para poder corregir este tipo de deficiencias, los alimentos que suplen las carencias de la anemia son las verduras, frutas, el perejil, las ortigas, los berros, las grosellas negras y las fresas, productos ricos en hierro y muy típicos de esta época del año", comenta el profesional y agrega que "la vitamina C ayuda a absorber el metal que se encuentra en estos productos. Para controlar los niveles de ácido fólico, es buena la levadura de cerveza, el germen de trigo, los frutos secos, el hígado y nuevamente, las verduras".