El contrato, que entrará en vigor en diciembre, incluirá mejoras en el mantenimiento preventivo para evitar fallos en hospitales y centros de salud
La Conselleria de Sanidad está ultimando la adjudicación y contratación del mantenimiento integral de los edificios e infraestructuras sanitarias públicas de la Comunitat Valenciana por un importe estimado de 187 millones de euros para los próximos cinco años.
En concreto, según ha indicado el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, “este mes de septiembre adjudicaremos el servicio de mantenimiento integral de edificios adscritos a la Conselleria de Sanidad”, que incluyen la gestión y el suministro de repuestos para reparaciones. Este contrato, dividido en 21 lotes, entrará en vigor el próximo 1 de diciembre, y se podrá prorrogar anualmente.
Cabe recordar que el mantenimiento de los edificios e instalaciones dependientes de la Conselleria de Sanidad se presta a través de empresas, con un contrato de mantenimiento integral que contempla en su alcance todas las instalaciones y partes de los edificios sanitarios: hospitales, centros de especialidades y centros de salud, además de los edificios de carácter administrativo adscritos a la Conselleria de Sanidad.
Al respecto, Marciano Gómez ha subrayado que, en este nuevo contrato, “se han introducido mejoras muy significativas que redundarán en el mejor mantenimiento y control de las infraestructuras”.
Entre estas mejoras destaca que el nuevo pliego incluye por primera vez un mantenimiento preventivo, que consiste en la sustitución de elementos y piezas defectuosas antes de que se produzca una avería. “Se trata de un elemento clave para garantizar la continuidad y seguridad de las instalaciones sanitarias", ha puntualizado el conseller, y ha añadido que “esta medida tiene como objetivo evitar paralizaciones y fallos graves de funcionamiento que puedan afectar a la asistencia sanitaria”.
Sin control
Gómez ha recordado que en las versiones anteriores de este contrato de mantenimiento “no se controlaba adecuadamente la sustitución de piezas y no se promovía la predicción de fallos, algo básico y elemental en el ámbito del mantenimiento preventivo”.
Sobre ello, el conseller ha lamentado “el deficiente mantenimiento de las infraestructuras realizado hasta la fecha, fruto de una mala gestión ya que en agosto de 2022 finalizaron los contratos de mantenimiento anteriores”.
Ante ello, ha explicado, “las empresas han seguido realizando la prestación sin disponer de un soporte contractual que permita controlar adecuadamente el servicio prestado y, lo que es más importante, exigir los resultados de calidad requeridos para garantizar el buen funcionamiento de las instalaciones”. “Una problemática a la que ahora damos una solución inmediata con el contrato que se va adjudicar de manera inminente”, ha concluido.
(Foto de archivo)
