Miguel Bataller. Ciudadano del mundo y jubilado.
Una vez acabadas las competiciones de clubs nacionales e internacionales, se nos presenta un verano saturado de fútbol de nuestras selecciones Sub 21, Nacional y Olímpica.
Acabado el campeonato de Europa de los más jóvenes, tengo que ponderar la actuación de los nuestros, que cayeron injustamente en semifinales contra una selección portuguesa, inferior a la nuestra que tuvo la suerte de poder marcar en un rechace rarísimo en la pierna de uno de los mejores jugadores de nuestro equipo (el central zurdo Jorge Cuenca del Villarreal CF), cuando apenas quedaban unos minutos para acabar el partido.
Durante todo el encuentro, llevaron la iniciativa los españoles con un equipo armónicamente diseñado por Luis de la Fuente, que brindó tanto en la semifinal como en cuartos de final ante Croacia, dos magníficos encuentros, en los que resultaron fatales los últimos minutos.
En el primero de ellos, un penalti de Guillamón a falta de dos minutos, obligó a un sobresfuerzo en la prórroga para acabar ganando por 2-1 con goles ambos de Puado.
En la semifinal, pese a haber merecido en varias oportunidades adelantarse en el marcador con tiros de Cuquerella al poste y otras intervenciones de Brian Gil, Brahim, Puado, Manu García y Miranda que salvaron el portero o defensas portugueses en última instancia no pudieron marcar e injustamente acabaron eliminados, pero con la cabeza muy alta.
Hay un gran entrenador, un excelente Álvaro Fernández bajo los palos y tres centrales muy compenetrados, como Mingüeza, Hugo Guillamón y Jorge Cuenca que saben crear y destruir desde la defensa, con dos laterales de una proyección ofensiva muy importante en Oscar Gil y Cuquerella y un pivote muy inteligente y con una capacidad de trabajo monumental como Zubimendi, que siempre está donde se le necesita y alrededor del cual gira el equilibrio defensivo del equipo, como Antonio Blanco que está llamado a ser su alternativa.
Y para crear fútbol, tenemos tanto a Manu García como al ex valencianista Gonzalo Villar a cuyos lados Brahim por banda derecha y Brian Gil por la izquierda son los encargados de llevar el balón al área rival en la que Puado siempre se mueve con peligro en desmarques inteligentes y remates intencionados por arriba y por abajo.
Completan la plantilla con menos presencia y en este caso casi testimonial Miranda en banda izquierda, Jeremy Pino en la derecha, Sancet en creación y Abel Ruiz y Fer Niño como alternativas a Puado en la punta del ataque.
El impecable estratega y Director de Orquesta Luis de la Fuente uno de los mejores formadores y motivadores de jóvenes futbolistas del panorama actual.
Hay motivos para ser optimistas de cara a los Juegos Olímpicos con esta hornada, en la que caben unos pocos jugadores que aportaran más experiencia para poder optar a medallas en Tokio.
La selección absoluta creo que está en un momento de transición, ya que con la salida de Xabi, Iniesta, Silva, Cazorla, Xabi Alonso, Cesc, Villa y la evidente veteranía de Busquets y Alba nos veremos obligados de cambiar nuestro juego de toque que nos hizo ganar tantas competiciones internacionales en los últimos trece años y sobre todo en el cuatrienio 2008 a 2012.
Ahora Luis Enrique, un entrenador muy peculiar y fiel a un sistema, pero no a un equipo que podamos memorizar los españoles porque cambia de jugadores continuamente, no ha repetido ni una sola alineación hasta ahora.
En la portería, parece ser ahora Unai Simón su preferido por encima de De Gea y un Robert que juega en Inglaterra y aún no ha debutado, dejando definitivamente en el olvido a Kepa.
En defensa parecen ahora indiscutibles Carvajal cuando se recupere y Marcos Llorente en banda derecha y la posibilidad de Jesús Navas, con Gayá, Alba y Reguilón en la izquierda, con dos centrales zurdos incuestionables como Pau Torres y Laporte, optando en la derecha, Eric Garcia y Diego Llorente de momento, aunque también han sido convocados antes Íñigo Martínez, Nacho y Mario Hermoso.
Los pivotes habituales suelen ser Busquets y Rodri, habiendo contado también para ese puesto con Saul, que no está pasando por su mejor momento.
En el clásico 4-3-3 de Luis Enrique, a los lados del pivote suelen jugar Koke, Fabian, Thiago y Pedri ( un juvenil, que ha sido la revelación de la temporada) quedando para los puestos de ataque y en función del equipo contrario o del estado de forma de los jugadores, Ferrán Torres, y Adama Traoré en banda derecha, Oyarzabal y Brian Gil por la izquierda y Gerard Moreno y Morata en punta con presencias habituales de Del Olmo o Asensio con Yago Aspas cuando así lo ha considerado conveniente el asturiano.
Isco, también ha desaparecido de las convocatorias como Lucas Vázquez y Sergio Roberto.
Con esos mimbres, suele hacerse el cesto de la selección española, pero curiosamente nadie se puede atrever a anticipar sin grave riesgo de equivocarse, la alineación básica para la próxima Copa de Europa, que comienza esta semana.
¿Es eso bueno o malo?
Ni buen ni malo, es lo que quiere Luis Enrique.
Me limito a decir que por sus resultados le juzgaremos, pero personalmente no soy nada optimista.
Me siento mucho más identificado con la forma de trabajar de Luis de la Fuente, que con la de Luis Enrique pese a no haber ganado, la Copa de Europa Sub 21.
¡Ojalá me esté equivocando yo y dentro de dos semanas tenga que felicitar a nuestro Mister por los resultados!