A los agresores sexuales ya les ha tocado la lotería con el Gobierno de Pedro Sánchez y la ministra Montero. Y la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, y sus socios en el gobierno municipal del PSOE, Compromís y Podemos son cómplices de ello. Hasta una treintena de agresores sexuales y violadores han pedido la revisión a la baja de su condena en los partidos judiciales de la provincia de Castellón. Y hasta 115 en el conjunto de España, en un macabro contador que no deja de crecer, en la misma proporción que lo hace la preocupación de las víctimas, cada vez más indefensas, y sus familias.
No, desde el Partido Popular estamos rotundamente en contra de la ley del Solo sí es sí, porque solo beneficia a los culpables. Y por eso, ante la negativa del Gobierno del PSOE a reconocer sus errores y rectificar, desde nuestro partido hemos llevado una iniciativa al pleno de nuestra ciudad para buscar la unanimidad de todos los partidos de la corporación municipal. Para unir fuerzas en una causa común que es beneficiosa para el conjunto de la ciudadanía, también en Castellón. Pero no, socialistas, nacionalistas y podemitas han vuelto a anteponer sus siglas al interés general. Prefieren vetar una iniciativa, por el hecho de venir del PP, y dejar que los violadores sigan beneficiándose de las rebajas de la condena e incluso estén saliendo a la calle, antes que reconocer su error o reclamar a sus jefes de filas las medidas que son necesarias para garantizar la integridad de las mujeres, también de Castellón.
Y aquí quiero poner unos datos sobre la mesa. Los delitos se han incrementado en un 14% entre enero y septiembre de este año 2022, una cifra que se suma al casi 30% del año 2021. Un suma y sigue que con cada avance supone un nuevo problema para los castellonenses. Y un dato muy preocupante: las violaciones han pasado de 3 a 7, es decir un crecimiento del 133% en solo un año. ¿Y cuál es la reacción del gobierno municipal? Hacer como no pasase nada, y aplaudir al Gobierno, que solo se pone de su parte, pero no del lado de las víctimas.
Lo que está pasando en este país es muy grave. En los últimos días estamos viviendo una situación inédita. Vemos cómo el PSOE cada vez está en posiciones más alejadas de la Constitución, fruto de una simbiosis con los partidos independentistas y radicales, que se han convertido en sus socios preferentes. ¿El resultado? Violadores, sediciosos, malversadores… se están beneficiando de una reforma legislativa que conlleva un deterioro de la calidad democrática y vaya en contra de los intereses generales de los ciudadanos.
Castellón no merece un gobierno que se ponga del lado de los delincuentes. De nada sirven las manifestaciones y los lemas en favor del feminismo. Ni los jerseys ni las alfombras violetas sirven de nada si, una vez plagada la pancarta, las víctimas quedan sin amparo. También el de Castellón.
