CC OO y UGT reclaman una mejora salarial de un 10 % en tres años, y la patronal pide más moderación por la crisis
Los sindicatos de UGT y CCOO calientan motores para iniciar un calendario de movilizaciones para reivindicar mejoras en el convenio laboral del azulejo que negocian con Ascer. El diálogo está en estos momentos paralizado por diferencias en las tablas salariales.
Patronal y sindicatos celebraron hace varias semanas la última reunión sin acuerdo y de momento las reuniones se han frenado por el desacuerdo existente. Los sindicatos proponen un aumento salarial de un 4 % en 2023, y un 3 % en 2024 y 3 % en 2025 de acuerdo al marco estatal (un 10 % en tres años), de acuerdo con el convenio marco estatal. La patronal propone alzas del 2,5 % en 2023, 2 % en 2024 y 1 % en 2025.
Ascer defiende una moderación por el contexto de crisis de la industria cerámica, con una caída de la producción por la falta de demanda, pero los sindicatos subrayan que las empresas tuvieron beneficios en 2022 mientras los trabajadores y trabajadores sufren una pérdida de poder adquisitivo por la inflación.
CC OO y UGT plantean celebrar en torno al 1 de diciembre asambleas para explicar la situación y convocar tal día una primera manifestación para mostrar su disconformidad con Ascer. El lugar está todavía por determinar.
Asimismo, en dichas asambleas se establecerá un calendario de manifestaciones que se prolongará hasta la feria de Cevisama, que también podría acoger una movilización de las organizaciones de trabajadores.
En la última reunión del convenio, Ascer adujo que el convenio marco no es aplicable y adujo que, según su contenido, “los negociadores deberán tener en cuenta las circunstancias específicas de su ámbito para fijar las condiciones salariales, de tal manera que la aplicación de las directrices anteriores podrá adaptarse en cada sector o empresa, con situaciones muy desiguales de crecimiento […] teniendo como objetivo el mantenimiento y la creación de empleo”.
Por otra parte, UGT informa que el comité de empresa de una planta de Almassora reclama que se reanuden las negociaciones del convenio “con voluntad de llegar a un acuerdo que mejore las condiciones laborales actuales de todas las personas trabajadoras de la empresa”. “Después de 11 meses de reuniones del Comité de empresa con la dirección de la empresa para negociar su convenio cuya vigencia finalizó el 31 de diciembre de 2022, en bloqueó las negociaciones sin intención de llegar a un acuerdo, no queriendo ofrecer ni lo acordado en el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva”, señalan las mismas fuentes.
