Los hechos sucedieron en 2014, al parecer, porque el agredido era de Siria, y le acusaron de 'estar de prestado' y 'faltar el respeto a las mujeres'
Castellón Información
La sección primera de la Audiencia Provincial de Castellón ha iniciado hoy el juicio a un guardia civil y dos vigilantes de seguridad, por presuntas actuaciones de tortura y agresión contra un ciudadano sirio.
Fuentes del Poder judicial señalan, que los hechos sucedieron en febrero de 2014 cuando, según el escrito del fiscal, los tres acusados interceptaron a la víctima en un complejo turístico de Oropesa. En el encuentro, el guardia le preguntó a la víctima si era de Siria y, al responder que sí, le contestó que ‘estaba aquí de prestado’ y que ‘faltaba al respeto a la mujeres’. En ese momento, el agente y uno de los vigilantes propinaron un puñetazo y patadas a la víctima. Posteriormente y según el escrito del fiscal, el agente acudió hasta en dos ocasiones a la inmediaciones de la casa de la víctima para identificarle. El fiscal pide para el Guardia Civil una pena de tres años y medio de prisión por un delito de torturas. Por el mismo delito, el fiscal solicita una pena de 18 meses de prisión para uno de los vigilantes de seguridad. Para el segundo de los vigilantes, pide una pena de 18 meses de prisión por un delito de omisión del deber de perseguir delitos.