El Ayuntamiento de Castellón reeditará el Pleno de Corrupción de febrero de 2018, solo que esta vez ha sido solicitado por el Grupo Popular y el objetivo es el de sacar los colores al PSOE, aunque estas cosas… las carga el diablo. El pleno ha sido solicitado formalmente a la alcaldesa y Amparo Marco tiene ahora un máximo de 15 días para convocarlo. La antesala de Fallas y Magdalena tendrá pólvora y masletà, y otros temas judiciales como aderezo.
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El juzgado de lo Contencioso Administrativo de Castellón, deberá decidir si se suspende o no, de forma cautelar, el procedimiento de ampliación de oferta de empleo público, que daría cobertura al proceso de selección del nuevo director de la Banda. La diligencia fue emitida el 7 de mayo. La diligencia del juzgado para solicitar información culminó antes del pleno extraordinario de ayer.
El equipo de Gobiernose cerró en Banda Municipal, en un pleno lleno de acusaciones cruzadas, mucha tensión y demasiados nervios, que giró en torno a la política de personal, los conflictos laborales, el director de baja y las denuncias formuladas por PP y CS, con calificación de “función bochornosa” por parte de la alcaldesa. CseM contó los votos y lo tuvo claro, una honrosa abstención para no perjudicar a los suyos y no dar ventaja a ‘la derecha’. La culpa de todo, ‘un cable pelado’.
La baja fue comunicada a las 15:05 horas, pero desde el Ayuntamiento no se comunicó la incidencia y no se supo nada hasta que se recibió una llamada personal