Las comuniones, las bodas y los bautizos que estaban previstas celebrar desde el mes de abril en adelante y que tienen su mes principal en mayo se harán, en el mejor de los casos, a partir de septiembre, tal como han previsto en varias parroquias de Castellón. La situación de crisis sanitaria por el coronavirus también ha afectado a la celebración de estos sacramentos al tiempo que algunos sacerdotes están pensando ya en realizar más misas, cuando puedan celebrarse, dado que el aforo a las iglesias será menor