Dicha iniciativa persigue proteger y promocionar el patrimonio histórico y cultural relacionado con las ancestrales rogativas y romerías que peregrinan de los distintos municipios de la provincia a Sant Joan de Penyagolosa. Entre los beneficios que supondrían estos reconocimientos, además de la protección y mantenimiento del territorio, también se podrían obtener ayudas para restaurar y poner en valor ermitas, masías o molinos y conservar y promocionar el entorno natural.