El ministro de Fomento presentó la prolongación de los Cercanías como si fuera una fiesta, pero habló de todo menos de Castellón. Reconoció que los Cercanías podrían haber entrado en servicio mucho antes, y culpó al PP de no hacerlo. Dijo que la AP-7 no se puede prorrogar legalmente, y por tanto, no se hará; y eludió pronunciarse sobre otras reivindicaciones como el Corredor Mediterráneo o la prolongación de la Autovía aunque anunció una Comisión de Conectividad